Zamora gana 31 razones para sentirse más segura con los agentes en prácticas que llegan a la provincia

La Comandancia de la Guardia Civil de Zamora ha recibido este miércoles a 31 guardias civiles en prácticas que durante las próximas 40 semanas completarán su periodo formativo en diferentes unidades de seguridad ciudadana repartidas por la provincia.

De los nuevos efectivos, 23 son hombres y 8 mujeres, lo que supone un 26% del total y refleja, según destacó el teniente coronel González Tejada, "el avance hacia una Guardia Civil más diversa, más representativa de la sociedad a la que sirve y también más rica en talento, en perspectiva y en profesionalidad".

La llegada de estos alumnos, procedentes de la 130ª promoción de la Academia de Guardias de Baeza y de la 171ª del Colegio de Guardias Jóvenes de Valdemoro, se enmarca dentro de la segunda fase de su formación y coincide con un refuerzo estacional de cara al verano en toda España.

A nivel nacional, han sido 2.733 los guardias en prácticas incorporados a unidades territoriales, 190 más que el año anterior.

En Zamora, su presencia permitirá aumentar la cobertura del catálogo de plantilla del 88% al 92%, un dato que, en palabras del subdelegado del Gobierno, Ángel Blanco, convierte a la comandancia zamorana en "una de las mejor dotadas de Castilla y León".

Los nuevos agentes quedarán encuadrados en 18 de los 24 acuartelamientos del territorio zamorano. Concretamente, reforzarán los puestos de Zamora, Bermillo de Sayago, Toro, Carbajales de Alba, Fermoselle, Fuentesaúco, Puebla de Sanabria, Fonfría, Villardeciervos, Alcañices, Mombuey, Benavente, Tábara, Aspariegos, Castroverde de Campos, Camarzana de Tera, Villalpando y Manganeses de la Lampreana.

El subdelegado del Gobierno subrayó que en Zamora la Guardia Civil tiene competencias en el 98% del territorio provincial, lo que multiplica la importancia de su presencia activa, sobre todo en zonas envejecidas y con alta dispersión poblacional.

"Aquí la Guardia Civil no es solo seguridad, es casa, es confort. Atiende a las personas mayores, a quienes viven solas o aisladas, y es fundamental para fijar población y ofrecer compañía", añadió, recordando que "esta institución tiene 181 años de historia y una capacidad de adaptación extraordinaria".

Uno de los ejemplos de ese compromiso social en el entorno rural es la Operación Idoso, un programa pionero implantado en Zamora desde 2012 para ofrecer seguimiento y atención a personas mayores que viven solas.

Según datos actualizados por el propio subdelegado, ya son casi 1.600 las personas acogidas a esta iniciativa, que ha sido replicada en otras provincias.

Durante la bienvenida oficial en la sede de la Comandancia, el teniente coronel González Tejada dirigió unas palabras a los nuevos guardias civiles, a quienes instó a integrarse "con entusiasmo y humildad" en una tierra "de historia, valores y esfuerzos". 

El coronel remarcó que su incorporación "no es solo una cifra, es una apuesta por la seguridad, la vocación de servicio y el futuro de esta provincia".

"Cada guardia civil cuenta y mucho", afirmó, recordando que "más personal significa más seguridad, más atención y más presencia en el mundo rural, que es donde más se necesita. Significa llegar antes, estar más cerca y dar mejor respuesta".

El responsable de la comandancia apeló también a la importancia de la cercanía como "una herramienta poderosa" en una tierra donde "muchas veces la soledad se confunde con el silencio".

Y animó a los nuevos agentes a no limitarse a actuar solo cuando se produce un incidente, sino a formar parte de la vida cotidiana de los pueblos: "Patrullar las calles, hablar con nuestros mayores, asistir a un colegio, pasar por la plaza. Eso construye confianza".

Los alumnos en prácticas ejercerán las mismas funciones que un agente en activo, aunque siempre irán acompañados por un guardia civil profesional. Como explicó Ángel Blanco, "nunca puede haber dos alumnos solos en una patrulla", pero sus cometidos y competencias son los mismos, lo que permitirá una mayor operatividad.

Aunque el periodo oficial de prácticas tiene una duración de 40 semanas, es posible que la estancia en la provincia se prolongue algo más, en función de las vacantes y de los procedimientos internos del cuerpo.

En cualquier caso, la presencia de estos 31 guardias supone un refuerzo tangible en términos operativos, pero también simbólicos. "Vuestra presencia no será solo una garantía operativa, será también una fuente de tranquilidad para los vecinos", concluyó González Tejada, señalando que "la vocación de servicio público no es solo una elección profesional, sino una forma de entender la vida".