Charcos en el Puente de Piedra cuando llueve: el Ayuntamiento enviará técnicos para revisar posibles deficiencias

Las últimas lluvias en Zamora han dejado patentes algunas de las deficiencias que presenta el Puente de Piedra, tras su gran reforma y rehabilitación. En las últimas semanas, no han sido pocos los zamoranos que han dejado un registro gráfico a través de las redes sociales de las grandes balsas de agua, que aparecen en el monumento cada vez que caen precipitaciones.

Un problema que se suma a las caídas y tropezones que algunos usuarios también han sufrido por el empedrado elegido para su decoración. De hecho, es más que habitual ver a los viandantes acumularse en los laterales del puente, donde sí se ha extendido una capa de cemento liso, mucho más amable para el paseo.

Sobre las constantes acumulaciones de agua, el concejal de Obras, Infraestructuras Urbanas, Movilidad y Participación Ciudadana, Pablo Novo, ha indicado que "si esta situación ocurre con mucha frecuencia", el Ayuntamiento de Zamora enviará a técnicos municipales para inspeccionar la zona y "saber por qué se producen y si son cuestiones estrictamente técnicas".

De ser así, el Consistorio reclamará a la empresa adjudicataria los arreglos pertinentes, dentro de su acuerdo de garantías con la obra. Algo que Novo asegura que el Ayuntamiento "ya hizo" tras la inauguración del puente. "Se les ha ido pasando un listado con cuestiones que los técnicos fueron detectando", detalla.

El concejal de Obras y Urbanismo recalca que "todo lo que se pueda demostrar que está mal, se reclamará y se cambiará". Eso sí, advierte que sobre las quejas del empedrado, su diseño responde "a las prescripciones de Patrimonio para que fueran acorde a las del Casco Antiguo".

Pero en términos generales, Novo indica que desde el Ayuntamiento creen que es "una obra bien ejecutada y que la sociedad está contenta". Añade que "ha tenido buena aceptación", y defiende que "es un cambio para mejor, tanto por funcionalidad como por estética".