La estupidez humana, a veces, no tiene límites. Si hay un lugar importante, y más en estos difíciles días, en los pueblos de Zamora son los centros médicos y consultorios. La crisis del Covid los ha mantenido cerrados durante muchos meses y poco a poco estaban comenzando a retomar su actividad. Y para rematar su complicada situación, todavía hay quien solo quiere hacer más daño a su propio centro médico y, por tanto, a sus vecinos.

Este ha sido el caso del centro médico de Morales del Vino, donde por tercera vez en dos meses, el cuadro eléctrico del consultorio ha aparecido de esta guisa: con pintura, cables arrancados y la caja completamente destrozada. A través de las redes sociales, varios vecinos de la localidad han hecho pública esta lamentable situación, donde aseguran no comprender las ganas de "hacer daño" a los vecinos de Morales del Vino y su centro de salud.