Óscar Puente amenaza con volver a Valladolid: "Me pone cachondo"

El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha llegado a las altas esferas, pero no se olvida de su pasado en su querida y admirada Valladolid. Una ciudad cuya actividad política sigue muy de cerca, sin quitar el ojo al actual alcalde, Jesús Julio Carnero, con quien mantiene una relación marcada por los reproches y las diferencias.

Así lo ha vuelto a demostrar en una entrevista en el programa Dos por Cuatro de la SER, en la que, además de hablar una vez más de su tierra natal, aprovechando, como de costumbre, para lanzar un nuevo dardo al regidor vallisoletano, Puente también se ha pronunciado sobre un posible regreso a la política local.

Y es que, no solo ha dejado entrever que es una opción que no descarta, sino que incluso ha amenazado con volver. 

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"No sé lo que va a ser de mi vida, pero cada vez que vuelvo y veo cómo se altera el panorama, me dan ganas", ha expresado.

Lejos de querer dejarlo ahí, entre risas y en actitud provocadora, el ministro ha continuado hablando del tema, ahora ya sí, refiriéndose directamente a Carnero, cuyo principal enfrentamiento tiene que ver con la voluntad de este último de llevar a cabo el soterramiento de las vías del tren en la ciudad del Pisuerga. Una idea que nunca ha gustado a Óscar Puente, defensor a ultranza de la integración.

Así, con sorna y en tono irónico ha apuntado: "Hay una querencia tremenda de volver. Y sí, cuando veo lo nervioso que se pone el alcalde del PP cada vez que regreso, me pone cachondo la idea".

Sea como fuere, lo cierto es que, tal y como ha dado a entender, el regresar a la política vallisoletana es una idea que ha rondado por su cabeza en más de una ocasión.

Grandes recuerdos

Si bien, esto no es lo único de lo que ha hablado Puente en relación a Valladolid. Acompañado de su hermana Sofía, el político también ha desvelado recuerdos muy personales de su infancia, adolescencia y madurez en su tierra natal.

De este modo, se ha referido a los tantos momentos vividos en la piscina deportiva, a las grandes amistades que aún conserva en la ciudad, así como el papel protagonista que la música de los Hombres G tuvo en su vida de aquella época.

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Y es que, según ha revelado el ministro, sus veranos consistían en eso, en largas jornadas de piscinas con amigos y con canciones como Sufre mamón o Venecia como banda sonora.

"Con 14 años hice ahí los que son mis amigos hoy. Nos seguimos viendo todos los meses, aunque ahora yo esté menos en Valladolid. Son mis amigos del alma", ha expresado.

Prueba inequívoca de que, pese a que reside en Madrid, Valladolid sigue siendo parte de su vida. Y, visto lo visto, lo seguirá siendo.