
Audiencia de Valladolid
Condenada a seis años de cárcel por prostituir a una menor aprovechando su acogimiento
Introdujo a la prostitución a la joven de 16 años. También ha sido condenado un cliente que pretendió tener sexo con la víctima.
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La Audiencia de Valladolid ha condenado a una pena de prisión de cinco años y medio de prisión a una mujer por un delito de corrupción de menores sobre una menor de edad, de 16 años, a la que introdujo a la prostitución aprovechando que se encontraba de acogida en su domicilio, como ha podido saber EL ESPAÑOL de Castilla y León a través de la sentencia del caso.
En dicha sentencia, la Sección Cuarta de lo Penal de la Audiencia de Provincial considera a la acusada autora de un delito de corrupción de menores y le condena por más cargos.
Por otro delito leve de lesiones a la menor, a una pena de un mes de multa, con cuota diaria de 6 euros, con responsabilidad personal subsidiaria de un día de privación de libertad por cada dos cuotas impagadas.
Por el delito de atentado contra los agentes de la autoridad a la pena de 6 meses de prisión, con inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de condena.
Por el delito leve de lesiones a un agente a la pena de 3 meses de multa, con cuota diaria de 6 euros, con responsabilidad personal subsidiaria de un día de privación de libertad por cada dos cuotas impagadas y otro mes de multa por otro delito leve de lesiones contra agente de la autoridad.
Además, en concepto de responsabilidad civil, la condenada deberá indemnizar a la menor con 3.050 euros y multas que suman 1.800 euros a los dos agentes heridos, según la sentencia.
Una sentencia que condena también a un varón por corrupción de menores, a un año de cárcel y dos de inhabilitación, al probarse que el condenado trató de tener sexo con la menor cuando sabía que solo tenía 16 años.
Los hechos
Unos hechos que se remontan al 6 de marzo de 2022, cuando policías nacionales fueron comisionados para acudir a un piso donde se escuchaban muchos gritos.
En el lugar se entrevistaron con la titular del domicilio, la condenada, y la víctima de 16 años. La misma se encontraba emancipada por concesión conjunta de sus progenitores, dado que su madre tenía proyectado regresar a su país y ella no podía quedarse con su padre, por lo que había iniciado gestiones a través de la progenitora, para mudarse al domicilio de la acusada, donde llevaba conviviendo desde hacía tres semanas.
En el lugar se personó una ambulancia y fue entonces cuando la menor comentó a la médico que había sido agredida por la casera porque quería que se prostituyera y habiéndola obligado a prostituirse, como reza la sentencia.
La menor comunicó a los actuantes que había otra menor, la hija de la acusada, que estaba oculta bajo una cama en otra habitación.
Para comprobarlo, los policiales accedieron al la habitación y la condenada se propinó un mordisco y un fuerte golpe en la nariz a un policía.
La menor confesó que en la fecha de los hechos, con 16 años, llevaba 3 semanas conviviendo en el domicilio con la detenida que aprovechando su confianza le empezó a hablar de la prostitución con la finalidad de convencerla para que la ejerciera.
Una vez convencida, la acusada concertó un servicio sexual con un varón y le entregó 150 euros negociados por la acusada. Días después, la condenada, el 5 de marzo de 2022, envió a la menor a otro piso. Antes de abandonar el inmueble, la víctima comprobó que el condenado tenía preparados 15 euros sobre un mueble de la tele y una bolsa de comida.