Un joven de 31 años ha permanecido casi dos horas encaramado a una grúa de obra en la calle Cardenal Torquemada, en el vallisoletano barrio de Rondilla, hasta que un bombero le ha convencido para que bajara del artefacto. 

En concreto, el efectivo que ha logrado que el hombre depusiera sus intenciones ha sido Mateo. Un veterano bombero de Valladolid que, en declaraciones a EL ESPAÑOL Noticias de Castilla y Léon, ha relatado que el joven "tenía problemas personales, estaba muy asustado y desorientado". 

Para tratar del calmarlo, el bombero vallisoletano ha tratado de "hablar con él de otros temas y tranquilizarlo". Momentos muy tensos para el propio agente y todos los presentes ya que, en algunos instantes, "él hacía el amago de tirarse". Pero, afortunadamente, el experimentado bombero ha conseguido que el joven bajara de la grúa y el asunto quedara en solo un susto. 

Un suceso ocurrido en torno a las 11 horas, y que ha mantenido en vilo a los vecinos de la zona hasta casi las 13 horas, que vieron como este hombre permaneció subido a lo alto de una de las grúas que se encuentran en las obras para la nueva sede de la Tesorería de la Seguridad Social. 

Al lugar se trasladaban varias dotaciones de Policía Nacional y Municipal, los Bomberos de Valladolid y una ambulancia del Sacyl. Los agentes cortaron la calle para que Mateo pudiera acercarse al joven lograra este final sin mayores desgracias.