Más de 2.500 personas mayores de la provincia de Valladolid requieren de algún tipo de ayuda para poder seguir viviendo en su domicilio. Año tras año, aumenta el número de vallisoletanos que necesitan algún tipo de apoyo en su día a día, como consecuencia del envejecimiento de la población y el consiguiente aumento de los casos de dependencia.

La Diputación de Valladolid cuenta con el Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD) para proporcionar una buena atención a todos ellos. La prestación está destinada a facilitar el mantenimiento de la autonomía personal de los mayores, prevenir el deterioro individual o social y promover condiciones favorables en las relaciones familiares y de convivencia, de modo que se trata de contribuir a la integración y permanencia de las personas en su entorno habitual gracias a los apoyos de tipo personal, socio-educativo, doméstico y social que prestan los casi 700 auxiliares del Servicio de Ayuda a Domicilio.

Profesionales cualificados para este tipo de tareas son quienes se encargan de facilitar esta atención a las personas mayores que los necesitan. Su finalidad puede ser asistencial, preventiva o rehabilitadora en función de las necesidades de cada persona. De esta forma, las personas de la provincia de Valladolid con limitaciones para su autonomía personal podrán recibir ayuda en sus tareas domésticas y en sus actividades de la vida diaria, así como apoyo en la realización de sus gestiones y salidas.

En este colectivo, se engloba a las personas mayores o con diversidad funcional y problemas derivados de trastornos psíquicos o enfermedades físicas de gravedad, cuyos cuidadores y familiares también recibirán el respaldo de la Diputación provincial.

Para solicitar el servicio y conocer el tiempo de atención que recibirá cada usuario, marcado por su grado de dependencia y sus necesidades individuales, los interesados deben acudir al Centro de Acción Social (CEAS) correspondiente, donde será un trabajador social quien valore la situación de cada persona y determine el número de horas y las tareas específicas que se incluirán en el servicio. Este se prestará en los días escogidos por el propio usuario en horario de mañana y tarde, de lunes a domingo y con festivos incluidos.

El Servicio de Ayuda a Domicilio, gestionado por la Diputación a través de la empresa Senior Servicios Inteligentes, filial de Clece, es clave en el mundo rural y para muchas personas mayores cuyos hijos ya no residen en el mismo municipio y cuya red social se ha ido estrechando con el paso de los años, lo que les ha llevado a un estado de soledad no deseada. Para paliar los efectos de esta situación, no solo se les proporciona una atención profesional y de calidad, sino también el acompañamiento y la escucha activa que necesitan.

El servicio, compuesto por auxiliares, coordinadores, trabajadores sociales, psicólogos y nutricionistas, ayuda también a crear empleo en el medio rural, a la vez que su plantilla teje una red que aporta seguridad al usuario y a su familia. Se garantiza, así, un seguimiento constante y todos los apoyos necesarios para que los mayores dependientes puedan permanecer en su hogar y en su entorno de siempre el mayor tiempo posible.