El aparcamiento de la Plaza Mayor ya luce los vinilos de la gestión de Auvasa

El aparcamiento de la Plaza Mayor ya luce los vinilos de la gestión de Auvasa

Valladolid

Auvasa gestiona desde la pasada noche el aparcamiento de la Plaza Mayor

El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, ha asegurado que es "un paso más para que los beneficios de servicios públicos reviertan íntegramente en lo público"

4 enero, 2022 10:41

Desde la pasada noche, el aparcamiento de la plaza Mayor de Valladolid ha pasado a ser gestionado directamente por el Ayuntamiento de Valladolid. Concretamente a través de Auvasa, la empresa pública que se encarga del transporte público en la ciudad.

A través de su cuenta de Twitter, el alcalde de la ciudad, Óscar Puente, ha aseverado que se trata de "un paso más para que los beneficios de servicios públicos reviertan íntegramente en lo público".

Para conseguir esta gestión pública, el equipo de Gobierno ha tenido que pasar por diferentes vericuetos legales. Así, a finales de diciembre, el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Valladolid desestimó la medida cautelar solicitada por Aparcamientos Españoles S. A. del acuerdo de la Junta de Gobierno Local del 3 de noviembre de 2021 por el que se fijaba fecha de finalización de la concesión del parking de la plaza Mayor.

El Pleno de 29 de diciembre de 1989 acordó fijar un plazo único de finalización de la concesión de las dos plantas del aparcamiento subterráneo de la plaza Mayor. La fecha indicada era el 4 de octubre.

Subrogación de trabajadores y continuidad de servicios auxiliares

Tras conseguir la gestión, el Ayuntamiento tendrá que subrogar a los trabajadores de la empresa concesionaria que prestan sus servicios en el mismo, así como asegurar la continuidad de los múltiples servicios auxiliares requeridos para la prestación del servicio, bien mediante subrogación en los contratos de los mantenedores ya existentes o mediante la celebración de nuevos contratos.

Al mismo tiempo, el Ayuntamiento va a realizar el mantenimiento, tanto preventivo como correctivo de todas las instalaciones, de modo que, en el improbable supuesto de dictarse una sentencia estimatoria, se devolvería en mejor estado que se encuentra en la actualidad y en pleno funcionamiento.