Suárez-Quiñones y Puente durante la visita al edificio Puente Colgante

Suárez-Quiñones y Puente durante la visita al edificio Puente Colgante

Valladolid

Puente, Quiñones y el improvisado debate en plena calle sobre la nueva Ley de Vivienda

Los dos representantes dieron sus opiniones sobre el proyecto que prepara el gobierno central durante la visita a unas obras de rehabilitación de un edificio

8 octubre, 2021 15:42

Dos políticos de Castilla y León mostraron hoy como se puede debatir de manera improvisada y sin un temario previo. Y lo hicieron en la calle, como ocurría en el antiguo ágora griega, lugar escogido por Sócrates para filosofar o por el apóstol Pablo para predicar sobre el Cristianismo. En este caso fueron el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, y el alcalde de Valladolid, Óscar Puente quienes actuaron como sabios helenos para mostrar sus opiniones sobre un tema candente: la Ley de Vivienda que planea el ejecutivo de Pedro Sánchez.

Ambos se habían citado en el antiguo edificio del Puente Colgante para visitar unas obras de rehabilitación que la Junta de Castilla y León lleva a cabo para ofertar 63 viviendas para jóvenes. Los dos atendieron las cuestiones de los medios de comunicación y, evidentemente, como la actualidad manda, una de las preguntas fue relativa a su opinión acerca de la Ley de Vivienda que se ha anunciado desde el Gobierno central.

Ambos afrontaron de frente la pregunta, sin rodeos y con opiniones contrarias, aunque eso sí, reconociendo que hasta que no la vean plasmada en papel no podrían valorarla de forma más concreta. Pero aún así, sin gritos, sin discusiones, respetando sus turnos y con un respeto exquisito hacia el adversario, poco a poco desgranaron una opinión sobre el tema. No fue nada parecido a los rifirrafes que se viven en el Congreso de los Diputados, en los Plenos de las Cortes o en los municipales. Al contario.  

Saludo del alcalde y el consejero en las obras del edificio Puente Colgante

Saludo del alcalde y el consejero en las obras del edificio Puente Colgante

El primero en intervenir fue Puente quien tras reconocer que “no la he estudiado en profundidad” sí defendió que “es una propuesta que, al tratar el tema de la vivienda, que es una competencia autonómica, sitúa en las Comunidades Autónomas una parte importante de su desarrollo y aplicación, por lo que creo que tiene recorrido y habrá que dialogar sobre ello”.

Acabar con la especulación

No obstante, el regidor subrayó que “todo lo que contribuya a facilitar el ejercicio de un derecho, como es el del acceso a la vivienda, que en este momento no se garantiza en España, está bien. Luego se podrá debatir sobre las fórmulas, pero creo que este es un derecho del que además depende la felicidad de las personas porque el tener o carecer de vivienda es un elemento fundamental en ese aspecto”. Por eso consideró que los poderes públicos “tenemos que contribuir a que los ciudadanos tengan ese derecho garantizado”.

¿De qué manera? Para Puente hay diferentes fórmulas. “Desde el Ayuntamiento estamos comprando viviendas, ampliando nuestro parque público. Hoy, vemos una actuación con la que se recupera un edificio abandonado y se rehabilita para ofertar 63 viviendas. Y tenemos también las ayudas al alquiler”.

Y con la nueva Ley, el alcalde cree que se toca un elemento de la ecuación que nunca se había ni siquiera rozado: la regulación de los precios del alquiler. “Una vía para intentar acabar con la especulación y me parece loable. Hay que intentar que esas fórmulas se ajusten a la legalidad y se respeten los derechos de los propietarios, pero no está de más que se ponga la mesa que la vivienda no sea un negocio especulativo incrementándose, por ejemplo, el tipo fiscal para las viviendas vacías de grandes propietarios”.

Mercado y libertad ante todo

Tras su discurso, Súarez- Quiñones, pidió también la réplica porque “aunque todos queremos que el derecho a la vivienda sea efectivo, mis opiniones son distintas”. Uno de los aspectos que le preocupa es que “se hagan anuncios sin tener el texto completo”. Así, explicó que “la música no nos suena nada bien porque parece intervencionista, de merma de la libertad y que apunta a que los arrendadores son los ricos y hay que ayudar a los pobres”.

El alcalde de Valladolid durante la rueda de prensa previa a la visita

El alcalde de Valladolid durante la rueda de prensa previa a la visita

En ese sentido apunto también que “estamos en un país de derechos y libertades, por lo que cualquier medida que tenga como objetivo mermar y restringir esos derechos, nosotros estamos en contra”. Por eso prefiere políticas de “incentivación y regular el mercado mediante apoyos o ayudas que es lo que hace la Junta de Castilla y León”. Como las que tiene de ayudas al alquiler o de dar seguridad a los propietarios para que voluntariamente pongan esas viviendas en alquiler.

Ante esta respuesta, Puente no se pudo resistir y se puso de nuevo frente a los micrófonos para aclarar que él se siente “intervencionista convencido”. Es más, recalcó que “ahí es dónde están las diferencias de ideología que algunos defienden que no existen”. Y su convencimiento por la intervención la cimentó en que “como poder público tengo que intervenir en la realidad para cambiarla”.

Y para ello puso un ejemplo: “Los comerciantes, en su mayor parte, se definen como liberales, pero están en contra de la libertad de horarios o de que se abra todos los festivos. Yo estoy de acuerdo con ellos porque yo soy intervencionista y si no intervengo e impido que se abran todos los festivos, como quieren las grandes superficies a los que les perjudica es a ellos”.

Más ideas

Parecía que con esa perorata se cerraba el debate, pero no, el consejero quiso también apostillar que “evidentemente son dos modelos diferentes. Nosotros defendemos la libertad y la intervención pública debe de ser subsidiaria. La libertad de las personas y el mercado deben de hacer el trabajo y la administración intervenir para compensar y corregir los desequilibrios. Lo que no se puede hacer es que la intervención sea el modelo principal”.

El debate hubiera seguido, sin duda. Pero había que visitar las obras. Y entre sonrisas y con el mismo talante con el que se saludaron en su llegada, tanto el alcalde como el consejero siguieron dialogando mientras entraban en el edificio recuperado para la construcción de viviendas de alquiler.