El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, ha estado presente en una conferencia de alcaldes europeos sobre el papel de las ciudades en la acogida de refugiados afganos, donde resaltó "la hospitalidad  y solidaridad de Valladolid ante la crisis humanitaria  y en la defensa de los derechos humanos". 

Óscar Puente, que ha intervenido por videoconferencia, ha lamentado el revés que este acontecimiento supone para los derechos humanos y para el progreso de la humanidad. La grave crisis humanitaria se plasma en que miles de personas hayan pretendido abandonar el país al ver su vida en peligro. 

El alcalde ha destacado que a pesar de la precipitación que ha rodeado a la evacuación y de que muchas personas han quedado retenidas en el país asiático, en esta ocasión la Unión Europea ha actuado con rapidez, al poner a salvo a sus ciudadanos y a muchos de los colaboradores y a sus familias que habían trabajado con los gobiernos e instituciones europeas: “En este sentido, manifiesto mi satisfacción por la respuesta del Gobierno de mi país ante esta situación, por cuanto España ha sido puerta de entrada a Europa de muchas de las personas que han podido escapar de Afganistán. Es nuestra obligación moral acoger a quienes han salido huyendo de ese país, así como, también, de reclamar a nuestros gobiernos que habiliten las medidas oportunas que garanticen que las personas que continúan en Afganistán y que teman por su seguridad puedan salir.”

Discursos xenófobos

“Para nadie es agradable abandonar por obligación el país en el que ha nacido, en el que tiene a su familia y en el que preveía desarrollar su proyecto de vida.  Las mujeres y hombres que, con lo puesto, han salido huyendo de Kabul tienen que  tener la oportunidad de labrarse un futuro . Y  enfrentándonos a discursos xenófobos y faltos de humanidad, estamos obligados a proporcionarles esa oportunidad”. 

Óscar Puente ha concluido su intervención citando las palabras del presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez: “Esta crisis nos ha recordado lo urgente que es alcanzar un acuerdo sobre inmigración en la Unión Europea, basado en los principios de responsabilidad y solidaridad, pero también de humanidad, y seguir profundizando nuestra política exterior y de seguridad común”.