El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Salamanca muestra su apoyo al personal de Unicaja Banco tanto en su rechazo al Expediente de Regulación de Empleo presentado por la entidad como en la defensa de un modelo financiero basado en la proximidad y en la implicación económica y social con el territorio para la prestación de servicios a la totalidad de la población.

Así lo han trasladado el portavoz socialista, José Luis Mateos, y la concejala María Sánchez a los representantes sindicales de los trabajadores y las trabajadores de Unicaja de Salamanca tanto en las concentraciones de protesta convocadas frente a las instalaciones de la calle Zamora como en la reunión celebrada ayer en el Consistorio salmantino con el objetivo de llevar al próximo Pleno municipal una moción que consiga recabar el respaldo y compromiso de toda la Corporación para evitar despidos y el cierre de oficinas en la ciudad.

En este sentido, reclamarán al equipo de Gobierno municipal que realice las gestiones oportunas ante el órgano de dirección de la entidad bancaria con el fin de evitar la aprobación del ERE presentado, de tal manera que sea negociado y acordado con los representantes laborales y, además, tenga en cuenta los objetivos de mantenimiento de estos servicios para frenar la exclusión financiera.

Del mismo modo, los trabajadores piden aunar esfuerzos para establecer fórmulas de colaboración y proyectos de cooperación entre el Ayuntamiento y Unicaja que supongan un revulsivo económico para la ciudad, permitan fijar población y consolidar los puestos de trabajo existentes en la actualidad.

Quinto banco del sistema financiero español

Unicaja Banco es el quinto banco del sistema financiero español por volumen de activos, formalizado por un amplio conjunto de cajas de ahorros de distintas zonas geográficas de España, entre las que se encuentran algunas de origen centenario y con un marcado carácter social, como en su día fue la Caja de Ahorros de Salamanca. Dispone de una red nacional de más de 1.400 oficinas, un equipo humano integrado por alrededor de 9.000 empleados y una base de más de 4,5 millones de clientes.

En septiembre de 2018 concluyó la integración del Banco de Caja España de Inversiones, Salamanca y Soria, S.A. (España Duero) en Unicaja Banco, a tenor de un proceso de fusión por absorción. Posteriormente, en julio de 2021 se formalizó la fusión legal de Liberbank por parte de Unicaja. Tras esta última integración, la entidad ha presentado un ERE que supondría el despido de 1.513 trabajadores, es decir, el 17,60 % del total de la plantilla, junto con otras medidas de flexibilidad, mediante la movilidad geográfica o funcional.

Cierre de 395 oficinas

Además, también resulta preocupante la previsión de cierre de 395 oficinas, ya que el mantenimiento de una banca comprometida con su territorio es clave para garantizar unos servicios financieros de cercanía e impulsar la economía local. Así, muchas personas se verán obligadas a desplazarse para realizar cualquier gestión al perder las oficinas existentes en sus barrios, como de hecho ya está ocurriendo en Salamanca, situación que si se agrava, abocaría a gran parte de la población a la exclusión financiera y tendría un impacto directo sobre la economía de la ciudad por la destrucción de puestos de trabajo.

Todo lo anterior se da cuando la mencionada operación de fusión de Unicaja Banco y Liberbank ha dado como resultado un beneficio neto de 1.395 millones de euros hasta septiembre de 2021, doce veces más que en el mismo periodo de 2020, según comunicó la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, y meses después de que el Banco Central Europeo tejiera una red de protección a las entidades financieras con medidas de estímulo económico sin precedentes.

Por todo ello, los concejales del PSOE quieren poner en valor el trabajo de los empleados de Unicaja, declarados esenciales para el buen funcionamiento del país en los meses más duros de la crisis sanitaria, y piden que el Ayuntamiento de Salamanca dé los pasos necesarios para apoyar de manera firme y comprometida al personal de las oficinas salmantinas con el fin de garantizar el empleo y unos servicios financieros fundamentales para la dinamización económica y para los vecinos de todos los barrios de la ciudad.