Los bares y restaurantes de Salamanca podrán abrir de nuevo este viernes, una vez ha bajado la incidencia de casos COVID-19 y la Junta ha aprobado cierta desescalada en las medidas restrictivas para la provincia.

No obstante, el presidente de la Asociación de Empresarios de Hostelería de Salamanca, Álvaro Juanes, acompañado de otros miembros de la directiva, ha dudado de que ese paso sea suficiente para dar viabilidad al sector.

Juanes ha explicado que las restricciones, con toque de queda a las 22.00 horas y con aforos del 33 por ciento, suponen que muchos de los hosteleros estén dudando de si es conveniente abrir, pues, con esas medidas, "no es viable" y "no se llega ni por asumo a salvar los muebles".

Por ello, ha insistido en que la Junta opte por el "modelo de Madrid" con más amplitud de horarios, hasta las 00.00 horas, y con permisos para completar más aforos en restaurantes y bares, además de la "necesidad" de ayudas directas.

Según datos aportados por la asociación, actualmente en Salamanca capital hay unos 1.600 establecimientos hosteleros, y otros 1.400 en la provincia, lo que supone unos 33.000 contratos al año, dentro de un sector que vive una "situación dramática" para los empresarios y para los trabajadores de estos negocios.