“Me siento estupendamente bien y estoy muy contenta, porque a mi edad no soy miedosa, 90 años dan para muchos”. Estas fueron las primeras palabras de Trinidad Azucena Díez García, la primera vacunada contra el COVID-19 en León, tras recibir la primera dosis.

Trinidad es residente del centro Hermanitas de los Ancianos Desamparados San José, en León capital y forma parte de los 137 residentes que recibirán la primera dosis durante la jornada de este penúltimo día de año. Sin embargo, aún no tiene claro qué hará cuando reciba la segunda dosis y pase a estar inmunizada. “Aún no he pensado qué será lo primero que voy a hacer, igual hasta algún disparate”, bromeó.

A sus 90 años de edad, Trinidad Azucena no pensó vivir jamás “algo tan inesperado, fatal y malo para todos” como ha sido la pandemia, pero también reconoce que “ya no pensaba llegar a esta edad”, aunque “en esta residencia llegamos a toda la edad que haga falta, porque nos cuidan tanto que resistimos”.

A los 137 residentes del centro vacunados en el día de hoy se suman un total de 49 trabajadores, encabezados por la primera en recibir la dosis, María Ángeles Campo López, la cocinera, que reconoció tener “muchas ganas” de vacunarse, así como “ningún miedo”, lo que la llevó a pedir ser la primera en hacerlo.

Mari Ángeles, que se mostró “muy contenta porque van a vacunar a los ancianos”, confesó que lo primero que hará, en cuanto pueda será algo de lo que tiene “muchas ganas” como es abrazar a su familia y sus hijos. No obstante, la cocinera abogó por “no bajar la guardia y seguir con la mascarilla y los cuidados”.