Originalmente, San Pedro de los Huertos, pero conocido como San Pedro de las Huertas. Este es el barrio leonés que conocemos este domingo. Es una zona tranquila con gente joven, pero que todavía mantiene la esencia de ambiente de barrio. San Pedro de las Huertas es un lugar ideal para vivir por muchas razones, como su cercanía al centro, por su disponibilidad de aparcamiento y por las múltiples actividades que tienen en la zona. El corazón de este barrio se encuentra en la calle de La Serna. 

Hablamos con Pablo Castro, presidente de la Asociación de Vecinos de San Pedro de las Huertas y un vocal, Juan Carlos Diez, para conocer de primera mano los problemas que tienen en el barrio, pero a su vez la labor que hacen desde la Asociación vecinal para animar a los residentes y sus secretos para mantener el barrio vivo. 

Pregunta: ¿Cuándo se fundó la Asociación de vecinos San Pedro de las Huertas?

Respuesta: La Asociación de vecinos se creó en 2005 y llevamos ya seis años dentro de la Federación ‘Rey Ordoño’. Somos una asociación con 400 socios con una aportación simbólica de dos euros, que desgraciadamente paga poca gente. Esta aportación y con la ayuda de la subvención municipal podemos seguir con la asociación vecinal y realizar pequeñas actividades para mantener vivo el barrio. La Asociación de San Pedro de las Huertas se fundó a raíz de una reunión de los presidentes de la comunidad de los edificios de la zona para explicar los problemas, que en su momento, tenía el parque. Además, la asociación creció con la intención de ser un interlocutor en el Ayuntamiento.

P: ¿Qué reivindicaciones tenéis sobre el barrio?

R: Una de las preocupaciones en el barrio ha sido siempre el estado del parque. Desde el primer día llevamos pidiendo unas vallas alrededor del parque, sin que sea nada ornamental, para que los jóvenes jueguen al fútbol sin que salga el balón a la carretera. Hemos pedido al Ayuntamiento que cambien los árboles porque muchos están secos y no dan sombra. Esto perjudica muchos a los señores mayores que no tengan un sitio para sentarse con el tiempo bueno. Otro de los problemas que no nos han solucionado es una fuga de agua en el parque. Cuando llueve o empieza la temporada de riesgo, esta zona está perdida. Por otra parte, en el barrio no tenemos una zona para el esparcimiento canino y eso hace que se generen problemas entre los vecinos y la gente de fuera. La limpieza se podría mejorar porque como estamos en una zona muy próxima al centro se hacen 'botellones' y la basura se acumula. Pero el problema es que se los jóvenes se meten debajo de los soportales y eso ya es propiedad privada. Una de nuestras peticiones, que previsiblemente esta primavera se haga realidad, es la instalación de un columpio adaptado en el parque para personas con dificultades. También hemos planteado al Ayuntamiento la construcción de unas pistas deportivas en la finca de ‘usos múltiples’ ubicada en la calle Profesor Xaime Andrés, pero todavía seguimos esperando una respuesta.

P: ¿Contáis con la colaboración del Ayuntamiento?

R: Poco a poco nos van haciendo cosas, nuestro barrio está atendido. Aunque hemos hecho más cosas en estos últimos meses, que en 15 años. Nos han instalado bancos nuevos, aunque han malgastado dinero. El parque ahora mismo está atendido que es una de nuestras principales preocupaciones. Hemos alertado al Ayuntamiento sobre un punto negro en el barrio donde han aparecido jeringuillas, botellas rotas y cristales y sí que hemos visto más presencia de la Policía Local. Una de nuestras iniciativas es emprender un concurso de pintura mural, que desde el Consistorio nos han conseguido la cesión de la Junta, pero de momento el proyecto ha quedado muerto, intentaremos retomarlo y conseguirlo.

P: ¿Qué actividades realizáis en el barrio San Pedro de las Huertas?

R: Las fiestas del barrio de San Pedro de las Huertas son la última semana de septiembre. Tenemos tres días de fiesta con visitas de los representantes municipales para disfrutar de un pregón, verbenas, reconocidos grupos musicales, animación, juegos y baile vermú. En nuestro barrio la queimada ya se ha convertido en una tradición porque los vecinos se implican y traen bizcochos para pasar un día de convivencia. También organizamos un magosto el fin de semana después de la festividad de Todos los Santos que es un éxito. En Halloween, las madres de los niños organizan una merienda en el parque. Aunque el CEAS del barrio se nos queda pequeño porque siempre está ocupado, desde la Asociación vecinal trabajamos para que los vecinos se animen a participar en otras actividades como rutas de senderismos o excursiones.