Zamora se convierte en la primera ciudad de Castilla y León en implantar el presupuesto participativo, un modelo moderno y que ofrece mayor participación democrática del ciudadano para decidir en qué se van a gastar diversas partidas del Ayuntamiento.

Zamora Participa (www.zamoraparticipa.com) ya está en funcionamiento, y sigue el modelo que ya funciona en Madrid, bajo el mandato de Manuela Carmena. Precisamente, en la presentación hoy de esta nueva plataforma interactiva con la ciudadanía, ha estado presente el concejal madrileño Miguel Arana, quien ha felicitado al consistorio zamorano por una iniciativa "muy nueva", al "dar las llaves de la ciudad directamente a los ciudadanos".

Con el presupuesto participativo, el Ayuntamiento de Zamora permite que los ciudadanos decidan los proyectos en los que se invertirán 560.000 euros, 200.000 de los cuales serán para iniciativas propuestas por los propios ciudadanos, 50.000 para cada una de las cuatro zonas en que se divide la ciudad (Norte, Sur, Este y Centro). Se llevarán a cabo las iniciativas más votadas, con un mínimo de 700 votos. Para participar solo es necesario registrarse en la plataforma -mediante email y contraseña-, donde se podrán hacer propuestas, entrar en los debates y realizar todo tipo de aportaciones. Quien no disponga de Internet, podrá acercarse a la Concejalía de Barrios, donde le ayudarán a hacer su aportación.

A modo de ejemplo, en Madrid se enviaron 5.000 propuestas, de las cuales resultaron ganadoras 200. "Es muy satisfactorio ver cómo los ciudadanos se preocupan por la ciudad", señala Arana, quien destaca que las iniciativas de carácter ecológico y social fueron las más apoyadas.

Del 2 al 26 de junio es el plazo de presentación de proyectos; del 27 de junio al 16 de julio, el de recabar apoyos; después, se valorarán los 5 proyectos más votados, y del 4 al 17 de septiembre se realizará la votación final.

El camino de los presupuestos participativos lo abrió Porto Alegre (Brasil) en 1989, con la llegada a la alcaldía del Partido dos Trabalhadores. Desde entonces, decenas de ciudades han apostado por esta nueva vía de participación de los ciudadanos en el gobierno de la ciudad, como en Francia, Argentina y España.