Amaia y Alfred.

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Televisión

Amaia de España… de mierda: el símbolo de una nueva generación

Tras la polémica, la joven no ha dudado en decir que se llevará a Lisboa el libro 'España de mierda'

1 mayo, 2018 08:51

Cuando hace unos meses, Amaia de Operación Triunfo consiguió ganarse el sobrenombre de Amaia de España, desde este mismo portal escribíamos que la joven navarra se había convertido en la Rosa de España de una nueva generación.

Por una parte, nos equivocamos ya que lo único que asemeja a ambas cantantes es su naturalidad e imprevisibilidad, su gran desparpajo sobre el escenario y el amor que el público que ha sentido por ellas.

Pero, por otra, a juzgar por lo que ha sucedido esta semana después de Alfred le regalara el libro España de mierda, no podíamos estar más acertados al decir que Amaia se ha convertido en el símbolo de toda una nueva generación.

Con esa naturalidad e imprevisibilidad de la que siempre ha hecho gala, la navarra no tuvo inconveniente el pasado viernes en decir que en la maleta que llevará a Lisboa no faltará el libro “España de mierda”.

“No tengo nada más que añadir”, decía Alfred ante los aplausos de la prensa. “Habéis hecho la promoción más grande de un libro en la historia porque se ha agotado”, continuaba el cantante. “El libro no trata nada de política. Que un cantante le regale a una cantante un libro de un cantante sobre otro cantante es antipatriótico”.

¡Por un libro! 

Como no, esa España rancia y de mierda en la que las cloacas del Estado guardan un vídeo siete años para utilizarlo cuando es necesario para 'matar' a una rival política, o a la que hay que salir a explicarle por qué se ha regalado un libro que no habla de política sino de las dificultades de un artista para sobrevivir en nuestro país, se lanzó a las redes a pedir el boicot al dúo y exigir a TVE que los retire de la carrera de Eurovisión. ¡Por un libro!

Pero la cadena pública hará oídos sordos a estas estúpidas peticiones. De hecho, sin que ellos mismos lo supieran, ese día habían elegido un lugar perfecto, el Teatro Real, justo enfrente del Palacio Real, para coronar a Alfred y Amaia como símbolos de una nueva generación.

Una nueva generación que ha dejado atrás los odios de trincheras para ser más inquieta, autocrítica, exigente, reformista, comprometida, participativa, defensora de sus derechos, de la cultura. ¡Larga vida a la Reina!