Adrián Madrid y Óscar Cornejo junto a María Patiño en los momentos finales de ‘Ni que fuéramos Shhh’.

Adrián Madrid y Óscar Cornejo junto a María Patiño en los momentos finales de ‘Ni que fuéramos Shhh’.

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Así ha sido la despedida de ‘Ni que fuéramos Shhh’ en TEN: “Todos tenemos derecho a una oportunidad en la vida”

El programa de La Osa (antes Fabricantes Studio) dijo adiós al público este 27 de marzo, antes de emprender el camino hacia las tardes de RTVE.

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La emoción estaba a flor de piel esta tarde. Ni que fuéramos Shhh se despedía de sus espectadores de TEN y del Canal Quickie de YouTube y Twitch en lo que suponía su entrega 189. Pero como bien han dejado claro desde el inicio de la emisión, no se van porque el programa haya sido un fiasco, sino todo lo contrario. Su presentadora y gran parte del equipo desembarca en La 1 a partir del próximo mes de abril en un nuevo formato, La familia de la tele.

Poco a poco, todos los colaboradores han ido compartiendo sus vivencias a lo largo de estos diez meses, con el agradecimiento como seña común. Y también han dado su lugar a algunos de los periodistas que habitualmente han participado en el formato, ya fuese desde el plató o en la Quickie Ronda.

El barrio de Las Tablas también se ha convertido, de manera involuntaria, en uno de los escenarios de Ni que fuéramos Shhh. Por eso, Belén Esteban ha acudido a la farmacia a despedirse, ese local al que acudió alguna que otra vez en pleno directo, como aquel día que David Valldeperas insistía en que veía a María Patiño desorientada. Y también han dicho adiós a la peluquería y otros comercios aledaños.

Tras ofrecer una narración en la que se hacía una equivalencia del programa con El Mago de Oz (en guiño a la promo que justo se emitía a la vez en RTVE), todos los presentes acabaron llorando. Y María Patiño fue la primera en pronunciarse, aguantándose las lágrimas.

Todos tenemos derecho a una oportunidad en la vida. Todos nos caemos alguna vez, o incluso nos tropezamos, o nos ponen una piedra en el camino. Pero créanme, no les miento. Siempre se puede. Gracias, gracias de verdad. Y gracias a mis compañeros por aguantarme”, decía la presentadora, haciendo así referencia a RTVE.

Lydia Lozano tampoco se aguantó las lágrimas, y Chelo, hizo se comprometió a disfrazarse en su salto a RTVE si así lo pidiesen los directores. “En la vida a veces es más cómodo sentirse rechazado que querido, porque te sientes querido te sientes en deuda. Y estaremos en deuda toda la vida con vosotros”, dijo Kiko Matamoros, por su parte, dirigiéndose a la productora.

Adrián Madrid y Óscar Cornejo aparecieron en pantalla, continuando con el símil del Mago de Oz, hablando de que es el momento de emprender “la penúltima fase del camino, el camino a casa”. Finalmente, los creadores de La Osa Producciones acabaron en el plató, y abrieron una caja con unos chapines de rubí para María Patiño, como los que llevaba Dorothy en la película de Judy Garland.

Siguiendo con el juego, pusieron unas baldosas amarillas que guiarían el camino, y un coro gospel cantó Over the rainbow en directo. Y todos los colaboradores caminaron por un sendero amarillo, en el que, al final, venía sobreimpresionado el logo de La 1.