Primer día de vendimia en la DO Somontano

Primer día de vendimia en la DO Somontano DO Somontano

Economía

Aragón brinda por una vendimia de calidad pero lejos de grandes cosechas: se esperan 114 millones de kilos de uva

Las bodegas aragonesas esperan recoger en torno a un 20% más de uva que el año pasado gracias a las lluvias de la primavera.

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Zaragoza
Publicada

Varias bodegas del Somontano, del Campo de Cariñena y de Borja han comenzado esta semana la recogida de uva en una vendimia que se espera más positiva que los últimos años, aunque sin echar las campanas al vuelo. Las lluvias de la primavera han favorecido a la producción de la fruta, que esta temporada será de gran calidad.

Así, las cuatro denominaciones de origen aragonesas -las tres anteriores más Calatayud- esperan recoger alrededor de 114 millones de kilos de uva en las próximas semanas, una cifra notablemente superior a la del año pasado, que no se llegó a los 100, aunque sin llegar las grandes cifras de la última década. En 2020 se recogieron hasta 140 millones de kilos.

El pasado lunes, las máquinas entraron en los primeros campos de Salas Altas y Salas Bajas, de la DO Somontano, en la provincia de Huesca. Esta comarca oscense es la que históricamente da el pistoletazo de salida a la vendimia en Aragón, con variedades de Chardonnay.

En el Somontano, este año esperan recoger alrededor de 17,5 millones de kilos de uva, más que en 2024, pero “un pelín” por debajo de la media de la Denominación de Origen, como explica su director técnico, Óscar Torres. “La uva está en muy buen estado sanitario. Tuvimos una primavera bastante lluviosa. Las temperaturas tan altas de junio han provocado que el crecimiento de la uva no sea el habitual y se haya quedado más pequeña, pero será un año de muy buena calidad”, destaca.

Uvas de la DO Somontano

Uvas de la DO Somontano DO Somontano

En estas bodegas, el 90% de la recogida ya está mecanizada, por lo que la necesidad de mano de obra ya es menor que años atrás. “Se están movilizando todos los viticultores, pero son las empresas de servicios y transporte los que se encargan de mover la uva del campo hasta la propia bodega. Hay más personal en el campo, pero no como en otros sectores como la fruta dulce”, señala Torres.

Cariñena, la más extensa

La Denominación de Origen más extensa vuelve a ser Cariñena, que este año espera alcanzar los 60 millones de kilos de uva, una cifra que desde el Consejo Regulador ven baja pese a crecer un 20% respecto al año pasado. “Los viñedos han recuperado vigor y madera, pero no producción. Venimos de unas cosechas medias de 83 millones de kilos. Son unas cifras conformistas”, explica su presidente, Antonio Serrano, que vive su primera vendimia al frente de la DO.

En esta zona, prácticamente no ha parado de llover en el último año, lo que ha ayudado a que la uva se encuentre en un estado “excelente”. “Desde justo el día de la vendimia del año pasado, han caído unos 480 litros, no solamente en primavera, sino también en otoño e invierno, lo que ha hecho que las cepas se recuperen. Esta ola de calor puede tener incidencia por las altas temperaturas nocturnas”, detalla Serrano.

Borja crece tras dos años escasos

Igualmente, en la DO Campo de Borja confían en recuperar buenas cifras durante las próximas semanas, con 28 millones de kilos, siete más que el año pasado y por encima de la media de la última década. Un respiro para una región que viene de dos campañas muy malas por la fuerte sequía, pese a que el pedrisco lastimó parte de la cosecha.

Las variedades de vino blanco de Magallón (Moscatel y Chardonnay) han sido las primeras en recogerse, mientras que las tintas se alargarán hasta mitad de septiembre, en función de los efectos de la ola de calor. “Estos calores no favorecen nada a la uva tinta y la garnacha, porque las maduraciones las hacen muy lentas y necesitan noches frías”, celebra el presidente de la DO Campo de Borja, Eduardo Ibáñez.

Aunque, este año, en Borja están más pendientes del extranjero y, concretamente, de Estados Unidos, ya que es uno de los principales destinos de sus botellas. “Hay tanta incertidumbre que no sabemos qué va a pasar. Si te suben dos euros la botella, te afectará. Son vinos que vendemos a cuatro o cinco dólares, así que supondrá algo, aunque no es el 50% que se hablaba al principio”, expone Ibáñez.

Calatayud espera a septiembre

Finalmente, la última en iniciar la recogida será la Denominación de Origen Calatayud, que prevé comenzar su vendimia el 20 de septiembre. Su presidenta, Almudena Anadón, que también debuta al frente de la DO, es optimista y confía en recoger ocho millones de kilos, más que los 6,5 del año pasado. “Ha habido lluvias durante todo el ciclo vegetativo y el viñedo se ha recuperado y es más fuerte”, ha apuntado.

Aunque todavía les falta más de un mes para la recogida, las sensaciones son positivas para tener una uva de gran calidad. “Llevamos un verano donde hasta ahora tampoco ha hecho calor. En julio las temperaturas han sido anormalmente frías, y en agosto ya contamos con que alguna ola de calor debe haber. Los enólogos estaban contentos”, ha remarcado.