Imagen de archivo de la recogida de la cereza

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Economía

Pistoletazo de salida a la recogida de fruta en Aragón: se espera cosecha récord de cereza

El campo aragonés recolectará en los próximos meses más de 600.000 toneladas de fruta de hueso y 250.000 de pepita.

Más información: El problema de los pueblos de Aragón ante la llegada de miles de temporeros: "No tenemos vivienda para todos"

Zaragoza
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En los campos aragoneses ya ha comenzado la recogida de fruta. Durante los próximos meses, se recolectarán más de 600.000 toneladas de fruta de hueso y 250.000 de pepita que harán las delicias de los ciudadanos, con una calidad alta gracias a un año que ha sido “superlluvioso”, y en el que se espera una cosecha récord de cereza, uno de esos manjares a los que muchos no nos podemos resistir.

Estos son los datos que manejan desde UAGA, confiando en una campaña en donde, al contrario de lo que ocurriera el pasado año, ironizan sobre un exceso de agua. “Que llueva en marzo es positivo y ayuda al cuaje. La fruta a la que pillaron las lluvias en floración han tenido un cuaje más débil, pero los albaricoques tienen muy bueno en muchas variedades y las cerezas pueden tener récord”, explica Óscar Moret, agricultor en el Bajo Cinca y responsable de Fruta de la organización.

Quizá uno de los problemas de esta campaña se encuentre en el granizo que ha caído en las últimas fechas, y que ha podido dañar algunos campos del territorio aragonés. Es el caso de Ángel Vicente, agricultor de Villanueva de Gállego, que ha perdido toda su cosecha de alberges por culpa de los pedriscos que cayeron la pasada semana en Zaragoza y sus alrededores.

En cualquier caso, ello no frenará una campaña que refrendará la posición de Aragón como uno de los mayores productores de fruta de Europa. Algunas zonas de Albalate de Cinca o Mequinenza ya han comenzado a recoger cereza o lo harán en breve, y se espera que a partir de mitad de mes se recolecten los primeros albaricoques.

Así, estos primeros días de mayo son los puntos álgidos de contratación de trabajadores temporeros. Las entidades calculan que serán necesarios unas 23.000 personas, algunas de las cuales ya han comenzado a llegar. En apenas una semana, en Huesca ya se han duplicado las contrataciones, de 4.000 a más de 7.000, aunque el pico llegará a lo largo del mes de junio.

Esta llegada masiva de trabajadores suele generar más de un quebradero de cabeza por la falta de alojamiento, un problema que parece haberse encaminado en los últimos años. “Desde el Covid hemos hecho silenciosamente un trabajo para dar alojamiento. Hay comarcas donde se está cerrando el círculo y cada empresa de 12 o 14 trabajadores, que es la media de la Comunidad, tiene alojamiento para ellos, que es la empresa media de Aragón, salvo grandes fincas”, explica Moret.

Es el caso, por ejemplo, de Fraga, que ha puesto en marcha por segundo año el espacio Clara Campoamor con capacidad para 40 temporeros y que ya albergó a 185 usuarios el pasado verano. Permanecerá abierto hasta agosto, cuando se prevé que finalicen los momentos de más producción frutícola, y cuentan con cuatro módulos habitacionales, uno de comedor, uno de lavandería y uno de duchas.

Paralelamente, esta campaña llega marcada también por los contextos internacionales y la situación del sector en España, con problemas para rentabilizar la producción. “Los aranceles de Trump no van a afectar a la fruta europea, pero esa incertidumbre económica hará que a veces tengamos miedo a la exportación y afecte a los mercados”, apunta Moret.