Las caídas centran el 54,6% de los accidentes del Bizi Zaragoza: la mayoría se producen en días de lluvia

Las Bizis de Zaragoza ya han viajado, "por lo menos", 17 veces a la Luna. Así lo ha explicado esta misma mañana Diego Marco, gerente Serveo Servicios en Aragón, quién ha confirmado que las bicicletas han registrado ya casi 5 millones de usos, sin haber cumplido todavía un año de vida en la capital.

El mes de octubre ha sido, de hecho, el momento "récord" del servicio, alcanzando los 1.100.000 desplazamientos en la ciudad. Y, con tanta ida y vuelta, no es de extrañar que más de uno haya acabado teniendo una mala experiencia. Concretamente, desde que se puso en marcha el servicio en la ciudad, se han registrado "139 accidentes de los que el 54,6% fueron caídas".

Lo que está claro, y así lo señala Marco, es que "a más desplazamientos, más posibilidad de accidentes". Sobre todo, cuando el clima no es el más adecuado para un paseo en bici.

El peor enemigo

De hecho, según los datos que la empresa ya ha podido recopilar en estos 10 meses, la lluvia se ha convertido en el peor enemigo de los ciclistas. Hasta 105 accidentes se produjeron en días con el agua como protagonista.

Aunque parece que el hecho de que el suelo esté mojado no es algo que asuste a los zaragozanos. Es más, este pasado lunes -con una tormenta de por medio- cogieron bici "unas 30.000 personas".

A los resbalones por el agua le siguen los atropellos, que rozan el 30% de los accidentes. En tercer lugar están los choques, ya sea con otras bicis o con otro tipo de vehículos, que centran el 10% de los incidentes.

Los accidentes, según Marco, dependen de "muchas cosas", ya sea por la lluvia, las prisas o por causas de mantenimiento. De esos 139 sucesos, la mayoría están provocados por fallo humano. Aunque el 20% se producen por fallos en la bici, casi el 19% de los ciclistas patinan, el 18% lo causaron turismos y solo en un 5% la culpa la tuvo el peatón.

A la izquierda un neumático de bici convencional frente a una rueda de Bizi, a la derecha. E.E Zaragoza

Sobre que la principal causa de los accidentes viene provocado por el desgaste de las ruedas, desde la propia empresa de neumáticos lo desmienten. "La gente está acostumbrada a pensar que si no hay dibujo significa que ya no agarra. Eso es en una rueda convencional, donde la capa de caucho es mucho más fina", explica Arnau Inser, responsable de Tannus.

Además de aguantar muchos más kilómetros sin necesidad de cambiar los neumáticos, estos no tienen el peligro de sufrir averías por pinchazos. "Todo el material es caucho, es como una rueda maciza. Por lo que no tienen aire y, además, no cuentan con otros materiales que puedan provocar resbalones", asegura.

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Eso sí, la probabilidad de deslizar con la bizi es mayor cuanto más mojado esté el pavimento y más liso sea el suelo. "Los neumáticos están preparados para un agarre 'interlock o enclavamiento' que es mayor en calzada seca y asfalto", confirma. 

La gran pregunta es, si no hay problema en que se desgasten las ruedas... ¿cuándo es adecuado cambiarlas? Según Inser, los neumáticos podrían tener "muchísimo recorrido sin problema", aunque estos se sustituyen "por cuestiones estéticas más que por peligro". 

Incidencias

El servicio comenzó en enero al 50% de su capacidad. Comenzaron a rodar 1.000 bicicletas, que disponían de 108 estaciones. Cifra que se multiplicó en el mes de agosto, alcanzando los 2.500 vehículos y las 276 paradas.

Un crecimiento que llegó también con una oleada de nuevos usuarios, que suman ya los 76.225 abonados (de diferentes tipos) y usos. Cada bicicleta suma unos 15 viajes al día (entre semana) y 11 (en findes y festivos). Una cifra que, además de convertir a Zaragoza en la ciudad de España donde más se pedalea con la bici pública, supone también un extra de trabajo en reparaciones.

Porque a más usos más accidentes y, a su vez, más arreglos. Según Marco, los técnicos ya han realizado unas 5.000 intervenciones en estos meses. La mayoría de bicis que llegan al taller lo hacen por haber sufrido algún tipo de vandalismo.

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Por esta causa, se han llevado a cabo 1640 reparaciones y sólo en el mes de septiembre fueron 310. Estos actos van desde robar manillares (que suponen un 19% de las reparaciones) hasta robar el cuentakilómetros de la bicicleta. En cualquier caso y por pequeñas que sean "hacen daño y ensucian el buen uso del resto de ciudadanos"

Las averías son el siguiente motivo, que suman unas 523. Estas pueden ser por diversos motivos: "Desde caídas en las que se rompen piezas hasta problemas mecánicos". En cualquier caso, cuando las bicicletas hacen parada por 'boxes' en Cogullada, "la intención es que vuelvan a rodar a las 24 horas", asegura Marco.