Agentes de la Policía Nacional han detenido al camarero de un restaurante de Alicante por la presunta comisión de un delito contra la intimidad. En concreto, los agentes han descubierto que había grabado con su teléfono móvil a una clienta del establecimiento mientras utilizaba el cuarto de baño del local, colocándolo oculto tras una planta de plástico antes de que entrase.

['Cazado' y detenido en Alicante por grabar con una minicámara en el baño a su expareja y a su hija menor]

Según cuenta la Policía Nacional de Alicante en comunicado hecho público este lunes, los hechos tuvieron lugar cuando la perjudicada, una clienta habitual del restaurante, pidió permiso para utilizar los baños del establecimiento. El camarero del local se excusó y le dijo que debía esperar ya que estaban sucios porque había vomitado una niña y que por tal motivo los iba a limpiar, permitiéndole el paso poco después.

La clienta, tras utilizar el inodoro, observó al levantarse "un destello extraño" que le llamó la atención, aseguran estas fuentes, descubriendo semiculto detrás de una planta de plástico, un móvil perfectamente colocado para grabar la zona donde se hallaba el inodoro.

Azorada por lo sucedido, cogió el terminal viendo que llevaba grabando varios minutos. En su estado de nervios, bloqueó el teléfono, salió del restaurante y se dirigió a la Comisaría de Distrito Norte de Alicante donde interpuso la denuncia e hizo entrega del teléfono móvil como prueba de los hechos.

De la investigación posterior, se hicieron cargo los agentes del Grupo de Delitos Tecnológicos de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Alicante quienes, tras comprobar que el teléfono móvil pertenecía al empleado del establecimiento de hostelería, le detuvieron como presunto autor de un delito contra la intimidad.

El análisis posterior del terminal telefónico permitió localizar el video donde aparecía un varón escondiendo el teléfono móvil en el cuarto de baño de mujeres y después se veía a la perjudicada, todo lo cual fue puesto a disposición de la autoridad judicial como prueba de los hechos.

El arrestado, de 26 años de edad y de nacionalidad argelina, fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Alicante.

De este caso, la autoridad judicial deberá averiguar si el detenido ha grabado a esta u otras clientas en otras ocasiones y si, como en otras ocasiones, los ha acabado difundiendo en internet o a través de mensajería instantánea o redes sociales ya que se trataría de un nuevo delito.