Con la música a otra parte. El Balonmano Benidorm tendrá que realizar sus entrenamientos la próxima semana en la vecina localidad de Altea, ya que su pista habitual en el Palau d’Esports l’Illa de Benidorm estará ocupada con la celebración del Benidorm Fest, certamen musical en el que se designará al representante de España en el Festival de Eurovisión de 2022.

El recinto benidormense acogerá las actuaciones de los artistas durante las semifinales de los días 26 y 27,  y la gran final, el 29 de enero. Toda esta actividad musical obliga inevitablemente al equipo que entrena Fernando Latorre a buscar una alternativa para continuar con su preparación para el regreso a las competiciones, que tendrá lugar a partir del 2 de febrero.

Por suerte, el Balonmano Benidorm mantiene unas excelentes relaciones diplomáticas con Altea y su Ayuntamiento. El equipo se entrenará en el Palau d’Esports Vila d’Altea de lunes a viernes y el sábado disputará un amistoso frente al BM Iberoquinoa Antequera, equipo también de la Liga Asobal, a las 18:00 horas.

No es la primera ocasión en la que el conjunto de Latorre tiene que exiliarse en Altea para entrenar o, incluso, para disputar un partido oficial. En el primer año del Balonmano Benidorm en la Asobal, el equipo llegó incluso a disputar varios compromisos de Liga en Altea tras clausurarse el Palau d’Esports l’Illa de Benidorm por un brote de legionella.

Posteriormente, eventos internacionales con una enorme participación, como un torneo de dardos, también obligaron al equipo a hacer las maletas y buscar escenarios alternativos para sus sesiones preparatorias.

El equipo se siente, además, muy cómodo en Altea, apenas a unos minutos de Benidorm y en una instalación que fue diseñada y pensada para el balonmano. El club, a través de un comunicado, ha querido “agradecer la buena predisposición” de la Concejalía de Deportes del Ayuntamiento de Altea para facilitar al equipo el uso de la instalación.

Sin los argentinos

El Balonmano Benidorm está a punto de completar su segunda semana de entrenamientos con vistas al regreso a la competición. Latorre solo cuenta con las ausencias de los dos internacionales argentinos, Pablo Vainstein y James Lewis Parker, quienes se encuentran concentrados con su selección en busca de un billete para el próximo Mundial de balonmano.

El regreso a la competición del Benidorm no podrá ser más exigente, ya que enfrentará en la Copa ante el Bidasoa Irún, su verdugo el pasado año, y posteriormente recibirá en su pista al Cuenca, equipo con el que mantiene una enorme rivalidad deportiva.