Un desfile de Moros y Cristianos en Villena, en imagen de archivo.

Un desfile de Moros y Cristianos en Villena, en imagen de archivo.

Cultura

Villena prepara sus mayores Moros y Cristianos y busca reconocimiento internacional: "Lo hemos vivido desde la cuna"

La localidad espera celebrar la edición más multitudinaria del 5 al 9 de septiembre y reunir a 60.000 personas para disfrutar sus fiestas.

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Villena
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Las calles de Villena ya respiran fiesta. Los artesanos apuran los últimos detalles de los trajes y los montadores colocan las gradas y escenarios para disfrutar de sus Moros y Cristianos, celebración que revolucionará el municipio del 5 al 9 de septiembre.

Con la cuenta atrás, los nervios de los festeros por escuchar el pregón alcanzan su punto máximo.

El presidente de la Junta Central de Moros y Cristianos, Paco Rosique, señala que "cuando llega el 1 de agosto, la gente se transforma. Es una alegría muy de aquí, muy de Villena".

Más que una fiesta, es un sentimiento, reflexiona, quien asegura que "ponerse el traje de festero es muy serio".

Uno de los mayores atractivos de la celebración es su gran participación, pues más de un tercio de los 40.000 vecinos forman parte de las 14 comparsas, siete moras y otras tantas cristianas, que durante cinco días llenan las calles de color y música.

"La igualdad en los festeros es plena. No hay ningún cargo que sobresalga por encima de otro y lo sorprendente es que cualquier vecino puede participar, de hecho, puede ser capitán o alférez. Puede tener cualquier cargo", resalta.

La esencia de la fiesta reside en la tradición y su herencia transmitida de padres a hijos. Una de las costumbres más arraigadas entre los festeros es "vestirse en casa de la madre, no importa si tienes 20 o 40 años".

Las escuadras especiales, característica de esplendor en las fiestas de Villena

Las escuadras especiales, característica de esplendor en las fiestas de Villena JC Vizcaíno

"Nosotros hemos heredado esa pasión por las fiestas porque nuestros mayores nos la inculcaron desde pequeños y eso es lo que hemos vivido desde la cuna", apunta.

Esto hace que los nuevos villenenses "se apunten como festeros antes que al registro", bromea.

Otro de sus fuertes es su tradición artesana y el "altísimo nivel" de los talleres del pueblo. Rosique sostiene que son estos los que "marcan tendencia al resto de pueblos de la provincia, vienen aquí para ver lo último en trajes".

Fiesta internacional

Todo ello ha permitido que las fiestas hayan sido reconocidas como de Interés Turístico Nacional, una distinción que para el municipio se queda corta, pues ya trabajan para lograr el reconocimiento internacional.

El concejal de Fiestas, Pepe Ferri, indica que es "un trabajo costoso que no se hace de la noche a la mañana".

Para Ferri, es un reconocimiento que Villena merece por su historia. "Tenemos unos actos muy emblemáticos, como la embajada que hacemos en el castillo de la Atalaya. Somos el único pueblo que la celebra en un castillo histórico".

El objetivo es convertir las fiestas de Villena en una visita obligada tanto para turistas nacionales como extranjeros que recorren la provincia de Alicante.

El éxito de público

"Entre la población y los visitantes, el pueblo aumenta hasta las 50.000 personas durante los cinco días de fiesta, y hasta 60.000 en jornadas puntuales", explica el edil.

"Siempre he dicho que las mejores fiestas las tiene su pueblo, pero estamos trabajando para tener más renombre y más interés", apunta.

"Es como el que está jugando en Segunda, en Primera o en Champions. Al final lo que queremos es posicionarnos lo más alto posible", concluye.