La vicerrectora de Relaciones Internacionales y cooperación para el Desarrollo de la UA, Rosa Martínez, junto a una mujer participante del programa en senegal.

La vicerrectora de Relaciones Internacionales y cooperación para el Desarrollo de la UA, Rosa Martínez, junto a una mujer participante del programa en senegal.

Alicante COOPERACIÓN AL DESARROLLO

Mujeres protagonistas: el proyecto de la Universidad de Alicante que transforma la educación en Senegal

La UA pretende con estas iniciativas que las mujeres tengan un rol protagonista en la academia.

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Desde sus inicios, la Universidad de Alicante (UA) se ha caracterizado por participar en varios proyectos de cooperación, colaborando con universidades de distintos países con el fin de mejorar la educación y hacer que esta sea accesible para todo el mundo.

Así, además de sus múltiples programas de Erasmus que pueden disfrutar estudiantes de cualquier titulación, la UA lleva años desarrollando proyectos en otros continentes como América y Africa.

Concretamente, en 2022, el equipo liderado por la rectora Amparo Navarro en la Universidad de Alicante tomó una decisión estratégica: reforzar la internacionalización de la institución con un enfoque especial en África. Hasta ese momento, la UA mantenía numerosos acuerdos de colaboración y movilidad estudiantil con Latinoamérica y Europa, pero la cooperación con universidades africanas era mucho menor.

Rosa María Martínez, vicerrectora de Relaciones Internacionales y Cooperación para el Desarrollo, explica que esta iniciativa nació del deseo de equilibrar el alcance de la universidad y generar oportunidades donde más se necesitan. "Queríamos ir más allá de los acuerdos existentes y centrarnos en una estrategia que realmente impactara en el desarrollo de la educación superior en África", afirma.

El primer paso fue la creación de un programa propio de la UA: un plan de becas destinado a mujeres de África subsahariana. Aunque ya existían ayudas para el norte del continente, este proyecto buscaba apoyar a jóvenes graduadas con vocación académica, permitiéndoles integrarse en grupos de investigación de la universidad por periodos de entre uno y cinco meses.

Un programa prometedor

Lanzado en 2022 y reforzado en 2023, el programa tuvo un éxito inmediato. En sus primeras ediciones, once mujeres procedentes de Kenia, Benín y Nigeria participaron en esta experiencia, enfrentándose a desafíos que iban más allá de lo académico.

"Nos dimos cuenta de que si para una mujer europea ya es difícil abrirse camino en la academia, en África las barreras son aún mayores", comenta Martínez.

Tras el éxito de este programa, la UA decidió dar un paso todavía más ambicioso: solicitar fondos europeos dentro de Erasmus para un proyecto piloto que se centrara en el papel de las mujeres académicas en Senegal.

Esta nueva iniciativa, financiada por la Comisión Europea busca generar un consorcio de trabajo con universidades senegalesas y crear sinergías entre ellas. La idea es abordar las barreras estructurales que dificultan la incorporación y permanencia de las mujeres en la educación superior, desarrollando políticas de igualdad y programas de acompañamiento.

Rompiendo barreras en Senegal

Este país de la costa oeste de África presenta desafíos particulares: un alto índice de pobreza, arraigadas tradiciones culturales y religiosas, matrimonios tempranos y una estructura social en la que el rol de la mujer está condicionado por la poligamia. Un reflejo de esta realidad es la presencia de una sola mujer profesora en un rango destacado en la universidad más importante del país.

Con el fin de caminar hacía este objetivo de romper el techo de cristal, en la primavera de 2024, la UA organizó la primera reunión presencial del consorcio en Alicante. El evento reunió a mujeres investigadoras, rectoras y otros actores clave, generando un espacio de diálogo y compromiso. "Las participantes mostraron una gran implicación y motivación. Vieron en este proyecto una auténtica ventana de oportunidades", señala Martínez.

Con esta energía, se planteó una nueva jornada presencial el pasado diciembre de 2024, esta vez en Senegal, en la Universidad de Gaston Berger en la ciudad de Saint Louis. Esta jornada de formación fue dirigida a mujeres en diferentes etapas de su carrera académica, desde alumnas de primer año hasta profesoras senior y catedráticas.

Según destaca la vicerrectora, el foro buscaba no solo fortalecer la presencia femenina en la investigación, sino también sensibilizar a los hombres sobre su papel en la equidad de género. "Muchos están de acuerdo en que las mujeres soportan una gran carga familiar, pero pocos asumen que ellos también deben compartir esa responsabilidad", explica.

Hacia un cambio estructural

Uno de los retos identificados en el proyecto es la timidez y falta de participación de las mujeres más jóvenes, muchas de ellas influenciadas por el respeto a sus mayores y por normas sociales que limitan su voz en el ámbito académico.

Por ello, además de jornadas presenciales, se ha diseñado un programa de formación continua con un 60 % de actividades online, asegurando que las participantes puedan acceder a recursos sin necesidad de desplazarse.

El proyecto está previsto que concluya en enero de 2027, tras una serie de actividades centradas en herramientas digitales, desarrollo de políticas universitarias inclusivas y estrategias para mejorar la empleabilidad de las académicas africanas.

No obstante, la UA ya está trabajando en una segunda fase que busque ampliar el impacto del programa, incorporando a más mujeres en posiciones de liderazgo dentro de la universidad y replicando el modelo en otras regiones de África.

"No se trata solo de dar oportunidades individuales, sino de transformar las estructuras para que las mujeres tengan un rol protagonista en la academia", concluye Rosa Martínez.

Con este programa, la Universidad de Alicante está marcando el camino hacia una cooperación internacional que no solo construye puentes, sino que también allana el camino para las futuras generaciones de investigadoras africanas.