La Audiencia de Alicante ha condenado a 15 años de prisión a una mujer acusada de matar a un amigo que le prestaba ayuda en el domicilio del barrio de La Florida de la capital alicantina donde ella residía.

La procesada, de 41 años y nacionalidad eslovaca, fue declarada culpable de un delito de asesinato con alevosía por un jurado popular, después de que ella hubiese admitido la autoría de los hechos durante su declaración en la primera sesión del juicio.

A partir de ese veredicto, la sentencia dictada por la Audiencia Provincial considera probado que, el 17 de agosto de 2020, la acusada acabó con la vida de su conocido, de 65 años, asestándole tres puñaladas con un cuchillo de cocina de once centímetros de hoja tras una discusión entre ambos por motivos desconocidos.

La resolución judicial sostiene que el ataque se produjo "de forma sorpresiva y repentina" para "evitar cualquier posible reacción defensiva" de la víctima e incide en que la acusada no actuó bajo la influencia del consumo de alcohol, pese a que en ocasiones lo consumiese de manera abusiva.

Además, concreta que, después de apuñalar a la víctima, limpió el cuchillo, lo ocultó y trató de eliminar los restos de sangre para dar aviso al servicio de emergencias de que había encontrado a su amigo herido en su casa.

Sobre la atenuante de confesión alegada por su defensa, el fallo subraya que "solo cuando se dio cuenta de que la investigación policial razonablemente la relacionaría con la muerte, admitió haberle acuchillado".

Sin agravantes ni atenuantes

La sentencia rechaza cualquier circunstancia agravante o atenuante entre las expuestas por las acusaciones y por la defensa.

Así, descarta que en el crimen concurriesen el ensañamiento, la obcecación o el arrebato, la afectación alcohólica, la confesión y la legítima defensa, al no haberse probado, según el tribunal, ninguna de esas condiciones.

De hecho, la acusación particular, ejercida por la familia de la víctima, elevaba inicialmente esa petición hasta los 25 años, tras incidir en la motivación económica del crimen. Mientras, la defensa planteaba que debía concederse las atenuantes de confesión y de embriaguez, toda vez que la mujer presentaba una adicción al alcohol.

No obstante, el jurado rechazó la concesión de esas dos atenuantes y también las circunstancias agravantes expuestas por las acusaciones.

Así, estimó que no había quedado demostrado que la acusada estuviese bebida en el momento en el que cometió el crimen y que su confesión era solo una estrategia exculpatoria.

También concluyó que la víctima no había tenido la oportunidad de defenderse. Sin embargo, no consideró probado el móvil económico como motivo desencadenante de la agresión.

Al margen de los 15 años de privación de libertad, la Audiencia de Alicante le impone también la obligación de indemnizar a la hermana del fallecido con la suma de 40.000 euros.

La sentencia es recurrible ante la Sala de lo Civil y lo Penal del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunidad Valenciana.