El motivo de la manifestación convocada en Pamplona por varias organizaciones abertzales era apoyar a cinco personas encausadas por colaboración con ETA. A su paso por el Palacio de Congresos Baluarte, los miembros de la comitiva se encontraron con unas caricaturas del Rey Felipe VI, Mariano Rajoy, la Guardia Civil y la Iglesia, entre otros. Los organizadores del acto invitaron a los asistentes a arrojar sus zapatos contra las imágenes. Los niños, arropados por la multitud, aceptaron el reto y atacaron los retratos. El acto ha despertado la indignación de las víctimas, que ya han anunciado que interpondrán una denuncia penal contra los convocantes por incitación al odio.

El acto, convocado por el colectivo Herriak Libre, tuvo lugar el lunes en el corazón de Pamplona, coincidiendo con la celebración del Día de la Fiesta Nacional. Al frente de la misma marchaban Walter Wendelin, Unai Vázquez Puente, David Soto Aldaz, Gabriel Basañez Ruiz y Aritz Gamboa de Miguel, a quienes los manifestantes pretendían arropar en vísperas de la celebración del juicio en el que se les acusa por colaboración con ETA y que comenzará este viernes.

Los cinco declararán a partir de este viernes por formar parte del aparato internacional de la banda para "recabar apoyos exteriores", tal y como indica el auto con el que el juez de la Audiencia Nacional, Pablo Ruz, inició el proceso en septiembre de 2011. Estas labores las habrían efectuado bajo el paraguas de la organización Askapena, vinculada a la estructura de ETA. El colectivo Herriak Libre, convocante de la manifestación celebrada en Pamplona, nació en el seno de Askapena.

En las fotos que los grupos afines a la convocatoria han colgado en Internet se pueden ver a los niños arrojando sus zapatos contra las caricaturas y la teatralización de un juicio popular contra el Estado español -al que los asistentes calificaron como "Estado terrorista"-.

La delegada del Gobierno en Navarra, Carmen Alba, reconoce que tenía constancia de la celebración de la marcha, pero no del acto en el que se invitaba a lanzar los zapatos contra las caricaturas. Por eso, apunta, desde la Delegación no pudieron tomar medidas previas contra la manifestación. Además, reitera su apoyo a las Fuerzas de Seguridad del Estado en la lucha antiterrorista.

Según ha podido saber EL ESPAÑOL, la Policía Nacional ha presentado dos denuncias contra los organizadores: una, ante la Audiencia Provincial de Pamplona, por un delito de odio; la otra, ante la Audiencia Nacional, por enaltecimiento del terrorismo.

El Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite) considera a través de un comunicado que es un "acto de extrema gravedad" que "la izquierda abertzale radicalice a las nuevas generaciones haciéndolas partícipes de unos actos en los que se fomenta la violencia y el odio como medios para conseguir unos objetivos políticos". Además, señalan que es "una aberración" que se trate de educar a los niños de Navarra "en el odio": "Criticamos la falta de pudor de los asistentes, que instaron a niños de corta edad a protagonizar el lanzamiento de zapatillas contra las caricaturas instaladas en la calle". Covite también ha presentado una denuncia contra la organización Herriak Libre ante la Audiencia Nacional por un delito de odio.