Fernando saliendo este martes de la comandancia de la Guardia Civil.

Fernando saliendo este martes de la comandancia de la Guardia Civil. Rafael Martín Europa Press Guadalajara

Reportajes Sucesos

Fernando, el nieto del exalcalde de Pioz que fue a robar y acabó apuñalando a los Villar en Chiloeches

Además de Fernando P. S. están implicados en el suceso su amigo David y una mujer venezolana de 34 años. La Guardia Civil trata de atar los cabos sueltos.

16 abril, 2024 02:19
Pioz | Chiloeches

Los vecinos de Pioz tenían claro que el grupo acabaría mal, pero en ningún caso de esta manera. Fernando (Pioz, 1999), el sobrino nieto de uno de los exalcaldes de la localidad durante el franquismo, está en el centro de la diana de los investigadores. Él es el presunto autor del crimen en el que murieron tres miembros de la familia Villar Fernández —Ángel y Elvira, de 52 años, y su hija Laura, de 22— el pasado sábado. En la localidad, no podían creerlo en la tarde de ayer. "Si sus abuelos levantaran la cabeza...", dice una vecina que no se explica lo ocurrido. 

Fernando es uno de los tres detenidos de los que hay constancia por su implicación en el crimen, cometido en la madrugada del sábado, en la urbanización Medina Azahara de Chiloeches. Hay quienes estiman que hay al menos un cuarto reo, pero este medio de comunicación no pudo confirmar tal extremo, ya que ni la Benemérita ni subdelegación del Gobierno esclarecieron el número total de detenidos en la jornada de este lunes.

Según apuntó Europa Press, los investigadores tienen en mente que Fernando fue el autor de la muerte de los tres miembros de la misma familia y el posterior incendio de la vivienda. Los otros dos detenidos fueron David, amigo del primero, como cómplice, y una mujer venezolana que no reside en Pioz, pero a la que se ha visto acompañar a Fernando en ocasiones dispares. 

[El crimen de los Villar Fernández en Chiloeches: el novio de la hija tenía una orden de alejamiento]

Insisten quienes residen en el municipio guadalajareño en que Fernando no parecía peligroso. Incluso, algún vecino se aventura a decir: "No esperábamos esto. Si en el colegio les dábamos hasta collejas...".  Sin embargo, Fernando tenía antecedentes por robo con fuerza, estafa, delitos de conducción sin carnet, delito contra la intimidad y también por desobendiencia y resistencia, apuntó Europa Press.

De su presunto cómplice, David, tenían una peor opinión en el lugar. De edad similar, "se veía venir que tendría problemas, aunque no esto. Le gustaban las maquinitas, el juego y casi todo", aseguraban personas conocedoras de la situación. "Una vez se llevó 7.000 euros de un vecino", narran en un bar de la localidad. "De este sí, pero de Fernando no...", apunta una señora.

David es escoltado por la Guardia Civil a la salida de la comandancia.

David es escoltado por la Guardia Civil a la salida de la comandancia. Rafael Martín Europa Press Guadalajara

A David le gustaba el Kickboxing. En el pueblo, los más mayores no sabían a qué familia pertenecía y señalaban que no eran del pueblo. Al menos, no del centro. Quizás, de alguna urbanización cercana. Es primo del exnovio de Laura Villar Fernández, víctima del suceso. Les une una estrecha relación de la que dejan constancia en sus múltiples cuentas en redes sociales. Además, ambos practican K1. El grupo se suele autodenominar 'La Mafia de Pioz'.

El padre sabía Taekwondo

El secreto de sumario establecido por el Juzgado de Instrucción número 4 de Guadalajara ha impedido hasta el momento conocer los avances de la investigación. Este lunes, los agentes de criminalística de la Guardia Civil, encargada del caso, trataban de dar luz a lo ocurrido. Se esperaba en algún momento la llegada de los detenidos para trata de reconstruir lo ocurrido. No obstante, pasadas las 20 horas del lunes, este hecho no se había producido en la urbanización Medina Azahara.

Los vecinos del lugar no conseguían explicarse qué ocurrió. Las teorías que manejaban eran dispares: no entendían por qué los asaltantes entraron a robar en una vivienda habitada, cómo se les había ido de las manos para acabar matando a tres miembros de una familia a la que presuntamente conocían y, después, incendiar la casa y, ni mucho menos, cómo habían reducido al padre de familia.

Comenzando por el principio, el crimen se produjo en torno a las 3.00 horas del pasado sábado, en el número 28 de la calle Fuente Valdoma de la urbanización Medina Azahara, situada en el término municipal de Chiloeches. Este complejo residencial ocupa varias hectáreas de terreno y está vallado al completo.

La Guardia Civil impidió el paso al lugar de los hechos durante todo el día.

La Guardia Civil impidió el paso al lugar de los hechos durante todo el día. DD

Para acceder hay que pasar por una garita de seguridad. Sin embargo, los propios vecinos afirman que hace años los cacos entraban aquí rompiendo la alambrada. "Los de seguridad ni se enteraban. A veces llamamos y tardan media hora en venir", apuntaba una vecina al mediodía de este lunes. 

Yeray, de 20 años e hijo menor de Ángel y Elvira, llegaba de fiesta a su casa el pasado sábado cuando vio su casa envuelta en las llamas. Llamó al 112 rápidamente y a su mejor amigo. No sabía qué ocurría.

Su madre, su padre y su hermana mayor estaban en el interior de la vivienda. Cuando los bomberos lograron acceder a la misma, tras apagar el fuego en torno a las cinco de la mañana, se encontraron los cadáveres de los familiares.

Sin embargo, la causa de la muerte de los Villar Fernández no había sido causada por el fuego: todos presentaban heridas de arma blanca.

[Los detenidos por el crimen de Chiloeches eran conocidos del exnovio de la hija de los Villar]

Las primeras hipótesis apuntaron al exnovio de Laura, la hija del matrimonio compuesto por Ángel y Elvira, de 22 años. C. B. tenía una orden de alejamiento sobre ella por presuntos malos tratos. Sin embargo, en esta pequeña urbanización aseguraban que se seguían viendo y él a veces se paseaba por allí.

"Es un chico muy conflictivo. Trapicheaba con estupefacientes, se ponía muy violento y siempre andaba metido en líos", afirmaba el pasado sábado una joven que conocía a la familia. Según el testimonio de varios amigos, "hace unos meses el chico le había puesto la mano encima a ella y fue cuando la Policía decretó la orden de alejamiento".

Una guardia civil escolta a la mujer venezolana a la salida de la comandancia.

Una guardia civil escolta a la mujer venezolana a la salida de la comandancia. Rafael Martín Europa Press Guadalajara

La Guardia Civil tomó declaración a la experaja de Laura, aunque en ningún caso lo detuvo. Sí lo está, tal y como ya se ha informado, su primo David, que también conocía a la joven fallecida. Fernando, principal sospechoso, pertenecía igualmente al grupo de amigos.

Los vecinos aún no se explican cómo pudo suceder. En realidad, lo que no entienden es cómo pudieron los asaltantes reducir a Ángel, el padre de la familia. "Era un hombre de gran envergadura. Por encima del 1,90 y bastante ancho. Además, sabía taekwondo. Es que no me entra en la cabeza qué pudo pasar ahí. Un solo tío no hubiera podido con él por mucho que supiera kickboxing", señala un vecino de la urbanización.

La principal línea de investigación se centra en un robo como móvil del crimen. Los investigadores encontraron relojes y joyas de los Villar Fernández en los registros realizados en las provincias de Guadalajara y Madrid. Al parecer, Laura vio a los asaltantes, los reconoció y por eso les asestaron múltiples y luego quemaron la casa para evitar dejar rastros. 

Con el secreto de sumario aún en liza, este martes han pasado a disposición judicial los detenidos. La titular del juzgado decidirá si los investigados deben quedar en libertad a la espera del juicio o pasan a prisión preventiva.