Mientras la política española no hace más que avergonzarnos día tras día, lo cierto es que la vida real sigue su curso y se producen hitos jurídicos en el sector digital de cierta relevancia que pasan desapercibidos, pero no por ello dejan de tener importancia.

Para empezar hace unos días entraba en vigor el Reglamento (UE) 2022/2065 del Parlamento Europeo y del Consejo de 19 de octubre de 2022 relativo a un mercado único de servicios digitales y por el que se modifica la Directiva 2000/31/CE (Reglamento de Servicios Digitales). Esta norma junto con el Reglamento de Mercados Digitales forman el llamado en el marco de la Unión Europea “Paquete de Servicios Digitales”, que es la respuesta normativa de la UE a la necesidad de regular el espacio digital protegiendo los derechos de los usuarios frente a las políticas en ocasiones abusivas de algunos de los prestadores de servicios en línea.

En particular, en los casos en los que se publica un contenido ilícito en una plataforma como puede ser una red social, una vez que esta situación se pone en conocimiento de la plataforma, ésta debe actuar con rapidez y tomar medidas motivadas respecto de la situación, siendo responsable en caso de no actuar una vez ha tenido conocimiento de la existencia del contenido ilícito. Las Grandes plataformas ya no pueden mirar para otro lado ante contenidos ilícitos bajo la amenaza de fuertes sanciones del regulador.

Además, el Reglamento lucha también contra la venta de productos y servicios ilícitos, aumenta la transparencia para los usuarios, prohibe la publicidad dirigida a menores así como los patrones oscuros e introduce el mecanismo de respuesta a las crisis por medio del cual se analizará en adelante cómo afectan a la crisis en cuestión las actividades de las plataformas en línea de muy gran tamaño y de los motores de búsqueda en línea de muy gran tamaño y se adoptarán medidas adecuadas para garantizar que se respeten los derechos fundamentales.

En segundo lugar, el 29 de febrero el Reglamento del Parlamento Europeo y del Consejo por el que se modifica el Reglamento (UE) n.º 910/2014 en lo que respecta al establecimiento de un Marco para una Identidad Digital Europea (EIDAS 2) ha sido aprobado por el Parlamento Europeo y queda sólo pendiente de respaldo del Cosilium y de publicación en el Diario Oficial de la Unión Europea. Este Reglamento pretende crear una wallet o billetera digital válida para toda la UE facilitando la autenticación de los ciudadanos europeos a la hora de acceder a servicios públicos y privados de forma electrónica y segura lo que va a permitir a los usuarios europeos aumentar el control y la protección sobre sus datos de carácter personal.

En tercer lugar algunos centros comerciales en España acumulan largas colas de gente que escanea su iris a cambio de recibir criptomonedas, negocio impulsado por Worldcoin, uno de los últimos proyectos de Sam Altman, director de la famosa empresa de inteligencia artificial OpenAI, creadora de ChatGPT, y hoy propiedad de Microsoft. El motivo de esta transacción es según los propios trabajadores de la empresa una estrategia de promoción de la criptomoneda y se quedan con tus datos para que no puedas realizar por duplicado este proceso de registro en otro lado para cobrar dos veces. No obstante la cuestión no es baladí. El iris es un dato biométrico, un dato de carácter personal especialmente sensible que te identifica frente al resto de seres humanos de forma inequívoca y al darlo a un tercero, siempre existe el riesgo de que acabe sirviendo para un uso distinto para el que se recogió. De hecho algunos países como Francia o Brasil ya lo han prohibido y en España la Agencia Española de Protección de Datos lo está investigando y todavía no sabemos cuál será el sentido de su respuesta.

Y finalmente y en el plano anecdótico nuestro Presidente del Gobierno ha anunciado en el Mobile World Congress de Barcelona la creación de un Gran Modelo Fundacional de Lenguaje de inteligencia artificial propiamente español, lo cual, siendo una buena idea (aunque no es nueva y se antoja ambiciosa teniendo en cuenta la ventaja que nos llevan los desarrollos norteamericanos y chinos), al entrar en el detalle del anuncio le deja a uno perplejo el hecho de que el modelo pretenda ser entrenado en castellano y además en el resto de lenguas cooficiales de España como así ha indicado el Presidente. Y yo me pregunto, ¿No sería mejor centrar los esfuerzos (principalmente el económico) en desarrollar un producto potente en castellano, la lengua que une a más de 600 millones de personas que distraernos con lenguas que hablan menos de 10 millones de personas en todo el mundo? Si quienes nos machacan con reciclar en más de 5 contenedores diferentes la basura de casa - siendo a veces más difícil que un sudoku elegir el contenedor apropiado - supieran el tremendo consumo energético que supone el entrenamiento en inteligencia artificial de estos modelos quizá se guardasen de entrenarlos en idiomas de tan corto alcance…