Verstappen domina en el tedio de Imola con Carlos Sainz quinto y Fernando Alonso a la cola

Las aguas han vuelto a su cauce en la Fórmula 1. Después de lo vivido en Miami con el sobresalto de la victoria de Lando Norris, Imola volvió a poner las cosas en su sitio y Max Verstappen regresó a lo más alto del podio, de donde nunca quiso bajarse. [Así vivimos la victoria de Verstappen en Imola]

El piloto neerlandés se hizo con su quinto triunfo de la temporada para ampliar más su ventaja al frente del Mundial y para demostrar que, en condiciones normales, sigue siendo el número 1. Verstappen salía desde la pole y terminó también en la primera plaza pese a que en las últimas vueltas Norris amenazó tímidamente con darle algo de emoción a la carrera.

Porque fue eso precisamente lo que le faltó a este nuevo capítulo del Mundial, algo de picante, algún ingrediente que invitara a despertar del letargo a los espectadores. No tuvo demasiada historia esta carrera y entre los mejores apenas hubo movimiento con respecto a cómo estaba configurada la parrilla de salida más allá de que Carlos Sainz perdió una posición en favor de Piastri.

Verstappen, al volante de su Red Bull. REUTERS

Norris finalizó segundo y demostró ser otra vez más el mejor del resto de los mortales, mientras que Charles Leclerc completó el podio al volante de su Ferrari. Piastri finalizó quinto y Sainz tuvo que conformarse con una quinta plaza que le dejó lejos de la pelea por el podio.

Aston Martin y Fernando Alonso consumaron su fin de semana desastroso en Imola. Ya advertía el asturiano de que había que tener precaución con las mejoras que presentaba el coche para este fin de semana, y a tenor de los resultados ninguna de ellas surtió el efecto deseado.

Sin apenas adelantamientos

La Fórmula 1 vivió un espejismo en el anterior Gran Premio de Miami. Allí Verstappen doblegó su rodilla ante Lando Norris y tuvo que conformarse con la segunda posición, pero en Imola hizo que todo regresara a la normalidad y volvió a adjudicarse el primer cajón del podio. 

La parrilla de salida fue un fiel reflejo del rendimiento de los coches y de sus evoluciones durante este fin de semana, especialmente entre los mejores, porque apenas se movieron las posiciones entre ellos. 

Tan sólo el adelantamiento de Piastri a Carlos Sainz al paso por boxes fue uno de los pequeños momentos a resaltar durante el día. Todo ello, mientras Fernando Alonso, que partía desde las últimas posiciones, se veía impotente y era capaz de remontar posiciones. 

Verstappen, Norris y Leclerc, en el podio de Imola. REUTERS

Verstappen dominó pese a que Norris amenazó en los instantes finales con ponerle algo de picante a la carrera. El de McLaren se acercó en las últimas vueltas al líder pero su presión fue insuficiente y tuvo que conformarse con la segunda plaza, mientras que Leclerc terminó tercero.

El australiano Oscar Piastri (McLaren) fue cuarto en una carrera en la que los dos Mercedes, los de los ingleses Lewis Hamilton y George Russell -que marcó la vuelta rápida- concluyeron sexto y séptimo, por detrás de Sainz, en el Gran Premio número 300 de la escudería de la estrella.

Verstappen lidera ahora el Mundial con 161 puntos, 48 más que Leclerc; que le arrebató la segunda plaza del campeonato a Checo Pérez, al que mejora ahora en cuatro unidades.