La cocina es uno de los espacios más importantes del hogar, en la que dada su actividad es habitual que se produzca un desorden natural. Por este motivo, es importante que exista una adecuada organización del espacio, que esté ordenado y funcional para poder facilitar las tareas de cocinado y que se mantenga en perfectas condiciones.
Para conseguirlo, hay algunos elementos que son imprescindibles, entre los cuales se encuentran los escurreplatos, muy presentes en los hogares españoles. Sin embargo, los modelos tradicionales que se sitúan sobre la encimera no son la mejor opción, ya que ocupan un espacio valioso al mismo tiempo que favorecen la acumulación de humedad y bacterias.
Afortunadamente, a medida que han ido pasando los años, han ido llegando alternativas más interesantes, entre ellas la de los escurreplatos de pared, que además de optimizar el espacio ayudan a poder disfrutar de una cocina más limpia y saludable.
Una alternativa al escurreplatos tradicional
Mientras que el escurreplatos tradicional tiene una forma y diseño que lo hace ocupar un espacio notable en la encimera, esto no sucede con el modelo de pared. Este objeto es fundamental para secar los utensilios tras lavarlos, pero en muchas ocasiones acaba siendo un lugar repleto de desorden. Las pilas de platos, vasos y cubiertos se acumulan durante horas y dan un aspecto desordenado.
Sin embargo, con el escurreplatos de pared, que está arrasando en España, nos encontramos ante una solución más que interesante que se ha convertido en toda una revolución a la hora de organizar la cocina. En lugar de ocupar espacio sobre la encimera que se puede utilizar con otros fines, se monta en la propia pared, liberando así mucho espacio.
Un escurreplatos de pared.
Su diseño hace que la cocina se vea más organizada y espaciosa, al mismo tiempo que facilita una mejor circulación de aire, haciendo que los utensilios y la vajilla colocados en el escurreplatos se sequen de una forma más eficiente y rápida. Al eliminar la necesidad de acumular platos sobre la encimera, se reduce de manera considerable el riesgo de que haya moho, suciedad y malos olores.
De igual forma, al encontrarse colgado de la pared, tenemos que tener en cuenta que el agua que se escurre de los platos no queda acumulada en una base que, con el paso del tiempo, se puede convertir en un foco de bacterias. En su lugar, cae el agua directamente al fregadero o bien se drena a través de un recipiente diseñado para evitar que el agua se pueda llegar a derramar por las superficies cercanas o al suelo.
Las ventajas del escurreplatos de pared
Aquellas personas que tienen una cocina pequeña o simplemente quieren tener una forma más eficaz y moderna de organizar el espacio de la misma deben tener presente la posibilidad de hacerse con un escurreplatos de pared, que es una excelente opción para conseguir un mayor orden.
Recurrir a él no solo libera espacio en la encimera, sino que ayuda a mejorar la higiene y el orden visual de la cocina. Además, dada la enorme cantidad de modelos que hay disponibles en el mercado, es fácil poder encontrar una opción que verdaderamente encaje en lo que estás buscando. Dicho esto, conviene destacar las que son algunas de sus principales ventajas:
- Optimización del espacio: la gran ventaja del escurreplatos de pared es la optimización del espacio, algo realmente útil en el caso de cocinas pequeñas en las que cada centímetro cuenta. De esta forma, se puede ahorrar mucho espacio en la encimera y utilizar ese espacio para preparar alimentos, guardar utensilios o colocar algún pequeño electrodoméstico.
- Evita la acumulación de humedad: uno de los mayores problemas de los escurreplatos tradicionales es la acumulación de humedad, ya que el agua que se escurre suele quedar estancada en la base, lo que genera un ambiente propenso para la proliferación de moho y bacterias. Un modelo de pared drena el agua de forma más eficiente, evitando la acumulación de humedad en superficies y, por tanto, ayudando a mantener un ambiente más limpio y saludable.
- Un diseño más elegante: el escurreplatos de pared ofrece una solución más elegante y discreta. Al encontrarse integrado en el diseño de la pared, el escurreplatos no afecta a nivel visual sobre la encimera, lo que es especialmente apreciable en cocinas minimalistas o modernas, en las que un diseño limpio y ordenado es fundamental.
- Más fácil de limpiar: el escurreplatos de pared es mucho más sencillo de limpiar que el tradicional, ya que, al estar fijado en la pared, no se acumulan en él restos de comida ni grasa en los rincones de la base del escurreplatos. Asimismo, el acceso a las superficies es mucho más sencillo, lo que facilita la limpieza diaria y la higiene.
Teniendo todo ello en cuenta, nos encontramos ante una alternativa innovadora y eficaz al escurreplatos tradicional, gracias al que se consigue transformar de forma notable la manera en la que se organiza la cocina. Gracias a su capacidad para optimizar el espacio, mantener la higiene y mantener el orden visual, se presenta como una solución moderna que responde ante las necesidades de los hogares actuales.
Al liberar la encimera y permitir una mejor circulación del aire, no solo consigue mejorar la funcionalidad, sino que también ayuda a que se genere en la cocina un entorno más saludable y limpio. Por lo tanto, no resulta extraño que este tipo de escurreplatos esté triunfando en España.