El nuevo buque insignia de Costa Cruceros, el bautizado como Costa Smeralda, estará propulsado por gas natural licuado (GNL), el combustible más avanzado de la industria marítima con el que la compañía logrará reducir su impacto medioambiental, mejorando a su vez la calidad del aire al no emitir dióxido de azufre, un 85% menos de óxido de nitrógeno y un 20% menos de CO2. Tal y como ha reconocido Neil Palomba, Director General de Costa Cruceros, S.p.A, “la incorporación de gas natural licuado marca un hito innovador en la industria de cruceros y en la marítima en general, ya que garantiza la reducción significativa del impacto medioambiental, sin comprometer otros aspectos fundamentales para nosotros, como es la seguridad de nuestros pasajeros”.

“Costa Smeralda representa un nuevo impulso para el uso de GNL en barcos de cruceros, una tecnología en la que fuimos pioneros en apostar y que establece un nuevo rumbo para el sector”, explica Palomba. Se trata de una decisión con la que han logrado reforzar su liderazgo en el turismo sostenible.

En un momento de crisis climática en el que cada acción para frenar la contaminación tiene un gran peso, esta gran innovación en el sector de los cruceros marca un antes y un después en la forma de navegar y de disfrutar de un viaje de ocio y placer por mares y océanos.

Costa Smeralda representa un nuevo impulso para el uso de GNL en barcos de cruceros, una tecnología en la que fuimos pioneros en apostar y que establece un nuevo rumbo para el sector

Neil Palomba, Director General de Costa Cruceros, S.p.A

El buque repostará gas natural licuado en Barcelona este miércoles 18 de diciembre. Desde allí saldrá con destino a Savona, partiendo de su puerto el 21 de diciembre, ya con los primeros pasajeros a bordo, para disfrutar de un crucero de una semana que visitará Marsella, Barcelona, Palma, Civitavecchia y La Spezia.

Mientras tanto, en el astillero Meyer Turku, en Finlandia, se está construyendo el “hermano” de este barco, el llamado Costa Toscana, cuya entrega está programada para 2021. Dentro de los siete nuevos buques con los que contará la compañía en 2023, cinco estarán propulsados por GNL: Costa Smeralda y Costa Toscana son los primeros. Esta ampliación de la flota tiene una inversión de 6.000 millones de euros, presupuestados en el plan de expansión del Grupo Costa, compuesto por Costa Cruceros, la alemana AIDA Cruises y Costa Asia.

Una 'smart city' itinerante

El uso de GNL no es la única innovación que busca reducir el impacto medioambiental que genera un crucero, ya que el Costa Smeralda se ha concebido como una smart city flotante:

  • El barco ha sido equipado con sistemas de desalinización para obtener el agua diaria necesaria.
  • Las luces son LED, lo que se traduce en un consumo de energía menor.
  • El calor que generan los motores se reintroduce en el sistema eléctrico.
  • Los ascensores de nueva generación son capaces de recuperar la energía que consumen.
  • El casco se ha diseñado para que la fricción con el agua sea menor.
  • Se fomenta el reciclaje de plástico, papel, cristal y aluminio, para proyectos de economía circular.
  • Los plásticos de un solo uso han sido eliminados en favor de materiales alternativos.
  • Su restaurante 'Laboratorio del Gusto' enseña a los pasajeros cómo contribuir con la sostenibilidad alimentaria.
  • Y gracias a su programa 4GOODFOOD, el desperdicio de alimentos abordo se ve reducido y aquellos alimentos que no se sirven van a causas benéficas.



En esta auténtica ciudad flotante hay también un espacio llamado Coliseo, “un área abierta de tres pisos situada en el centro del barco que cuenta con tecnología audiovisual de vanguardia que ha requerido diseños y capacidades de construcción muy específicos”, ha comentado Jan Meyer, CEO del astillero finlandés Meyer Turku. En el buque, los pasajeros también tienen una completa oferta de ocio y restauración, que incluye un museo del diseño italiano llamado CoDe –Costa Design Musem-, bares temáticos, 16 restaurantes, un spa y múltiples áreas de entretenimiento para grandes y pequeños.

Con el Costa Smeralda ya en su flota, el Grupo Costa tiene 29 barcos operativos que refuerzan el liderazgo de la compañía en Europa y China. Este es el primer barco en propulsarse de forma distinta pero no el último. Así abre camino a una forma diferente de entender los cruceros desde la sostenibilidad.