Así será la nueva calle Colón de Valencia. Ayto Valencia
Así será la nueva calle Colón de Valencia: acera más despejada, sin parking de motos y con los mismos tres carriles de tráfico
El consistorio empezará las obras de renovación de esta céntrica vía "después de Fallas" y "durarán cinco meses".
Más información: Marta, vecina de Valencia, sobre la saturación del centro en Navidad: "Es imposible andar 2 calles sin chocarse con alguien"
La calle Colón de Valencia empieza su cuenta atrás para sufrir un importante lavado de cara. Como ha asegurado la propia alcaldesa de la ciudad, María José Catalá, "hace 30 años que no se interviene en esta vía". Ahora, el Gobierno municipal ha decidido renovarla gracias a su Plan Valentia.
La idea de la alcaldesa es clara: "Quitar los elementos urbanos que restan espacio al peatón". Así, quiere que la nueva calle Colón sea un equilibrio entre viandantes y vehículos, con aceras más despejadas pero manteniendo los tres carriles de tráfico. Y sin aparcamiento de motos.
No habrá que esperar mucho para ver la nueva calle Colón. De hecho, si se cumplen los plazos, debería estar terminada en menos de un año. Para que así sea, el Ayuntamiento tendrá que empezar las obras "después de Fallas" y, teóricamente, durarán "cinco meses".
El Plan Valentia es una iniciativa del Ayuntamiento para "renovar y dar identidad al centro de la ciudad", ha explicado Catalá. Algo que va ligado al manual de unificación de imagen "para acabar con el desorden urbano".
Buena prueba de ello son, por ejemplo, los nuevos maceteros que ocupan ahora la plaza del Ayuntamiento. Hasta ahora las plantas descansaban sobre unas estructuras verdes que no gustaron a muchos vecinos. Ahora, unas macetas grises de grandes dimensiones lucen en la calle. Serán las mismas en futuras intervenciones.
La renovación de esta céntrica calle llega tras pasar 30 años desde la última intervención, según la alcaldesa. Por ello, "es un compromiso que se va a abordar con urgencia", ha señalado durante la presentación del proyecto.
La obra incluye la calle Colón, la plaza Los Pinazo y Cerdà de Tallada -detrás del Palacio de Justicia-, tiene un plazo de ejecución de cinco meses, y cuenta con un presupuesto de 2,5 millones de euros. Todavía no se ha dado a conocer la fecha concreta, pero adelanta la alcaldesa que será "después de Fallas". Previsiblemente, entre abril y mayo.
Destaca la alcaldesa que dar con la renovación perfecta no ha sido tarea fácil: "Hemos hecho reuniones recurrentes con un consejo de arquitectura nacional e internacional para estudiar lo que pasa en grandes ciudades y traer lo mejor".
Para reordenar la calle Colón, Catalá explica que existen tres premisas con las que se ha trabajado. Una de ellas es la de "eliminar elementos urbanos que quitan espacio al peatón". Para eso, adelanta que con las obras se sacarán de las aceras las horquillas de aparcamiento para bicicletas, así como la estación de Valenbisi.
Pero nada de esto se suprime, simplemente se cambia de lugar. Así, estos elementos ocuparán el espacio donde ahora figuran las 134 plazas de aparcamiento para motos, en la calzada.
Plaza Los Pinazo tras la renovación. Ayto Valencia
Si hay bicicletas, evidentemente no pueden aparcar las motos. Este es otro elemento que cambia de ubicación. Con la remodelación, los lugares para estacionarlas estarán en las calles colindantes. Y quien aparque en la acera de Colón, adelanta el concejal de Seguridad y Movilidad que estarán más vigilados.
Porque las plazas de motos no se suprimen, sino que se trasladan a otras calles donde lo que sí que se eliminarán serán algunas plazas de zona azul para coches.
Otra premisa es "mejorar la seguridad de los viandantes". Para ello, Catalá apuesta en la calle Colón por la ampliación de los pasos de peatones, así como por utilizar "nueva señalética y nuevos semáforos" de personas y bicicletas.
En cuanto a los carriles, Catalá ha optado por mantener los tres que figuran en la actualidad: uno para EMT y taxi y dos para vehículo privado. Eso sí, se direccionarán los carriles para que no hagan zig-zag.
Para aumentar la seguridad y el buen flujo del tráfico, el proyecto contempla la instalación de bolardos en calles como Hernán Cortés, Félix Pizcueta y otras, "para que los vehículos no estacionen mal y dificulten el paso de otros".
La tercera premisa es "unificar la estética". Esto pasa por cambiar el material de las aceras, haciéndolo del mismo material que en las calles aledañas. En este caso, aceras de granito. El asfalto también se renovará, y se utilizará uno fonoabsorbente que reduce hasta 10 decibelios el ruido y hasta un 20% el CO₂, según indica el proyecto.
Además, se renovará -y ampliará- el material urbano. Lo harán con la instalación de 60 bancos y sillas, "un 40% más que lo que hay en la actualidad", apunta Catalá. También se ampliarán los alcorques y se instalarán 90 papeleras.