Teresa Ribera. Johannes Neudecker / dpa
Ribera, tras un año de silencio, presume de los millones de la UE para la dana sin explicar por qué paró las obras antirriadas
La exministra ha hablado en Bruselas por tercera vez de la riada y todavía no ha cumplido su promesa de visitar la zona cero de la tragedia.
Más información: La desaparecida Teresa Ribera: un año sin pisar Valencia tras la dana ni explicar por qué paralizó las obras del Poyo
En Bruselas y 380 días después, Teresa Ribera ha reaparecido para dar cuenta de "las lecciones aprendidas" en torno a la fatídica dana en la que el 29 de octubre de 2024 perdieron la vida 229 personas en la provincia de Valencia.
Lo ha hecho en un acto de la Delegación del PSOE en el Parlamento Europeo, donde ha trasladado la intención de crear un "servicio de alerta de emergencias por satélite" que actúe "en todo el territorio de la Unión Europea" y ha presumido de los millones que la UE ha destinado para la recuperación.
En la ponencia 'Lo que aprendimos de la dana', ha explicado las actuaciones que ha llevado a cabo la Unión Europea para la reconstrucción de Valencia pero no ha hecho mención en ningún momento a las obras no ejecutadas sobre los barrancos valencianos, las cuales se aprobaron en 2011.
"La Comisión ha ido reconstruyendo junto al Gobierno algunas de las partidas que permitían una recuperación", ha asegurado.
En concreto, la exministra ha detallado que se han destinado "casi 1.000 millones de euros del Fondo de Solidaridad de la Unión Europea para la reconstrucción tras los daños de las inundaciones".
Además, también ha comunicado la entrega de otros 640 millones del Fondo de Desarrollo Regional y otras reasignaciones y dotaciones de recursos.
"La dotación del Fondo de Solidaridad de la Unión Europea es la más importante que nunca jamás se ha atribuido a ninguna zona afectada", ha subrayado.
No ha mencionado las obras hidráulicas pero ha admitido que los barrancos que destrozaron l'Horta Sud no estaban preparados para la riada. "Estaban preparados para un periodo de retorno de 100 años, no para uno de 500 o casi 1.000, que es lo que cayó", ha asegurado.
En este sentido, ha compartido "dos lecciones" que la riada ha dejado en relación con la protección de los espacios inundables, que son: "entender y conocer los desafíos para afrontarlos", además de "pensar cómo desarrollar al máximo las capacidades de autoprotección y alerta".
"Teníamos los elementos institucionales para hacerlo", ha asegurado en una intervención en la que ha compartido su reflexión de que "no puede volver a ocurrir" una tragedia semejante pero en la que no ha hablado de las obras no ejecutadas en el territorio valenciano.
"Se podría haber evitado"
Durante su intervención le han acompañado Sandra Gómez, Leire Pajín e Iratxe García, quienes se han mostrado muy críticas con la Administración autonómica y tampoco han mencionado la no ejecución de obras hidráulicas.
Por su parte, Leire Pajín, en alusión a la Generalitat, ha subrayado que "no estuvieron allí cuando más lo necesitaban los valencianos".
Por otro lado, Sandra Gómez ha hecho referencia al "dolor" de las víctimas. "Perder a alguien siempre es doloroso, pero perderlo con la certeza de que se podría haber evitado debe ser un tormento", ha destacado sin mencionar las obras hidráulicas que según los expertos habrían mitigado el impacto de la tragedia.
De la misma manera, ha incidido en la "valentía" de las víctimas al "exigir responsabilidades y pedir justicia y reparación por los fallecidos" en la dana.
El acto que ha tenido lugar en Bruselas llega más de un año después de la dana. Es la tercera vez que Ribera habla de la riada de octubre de 2024 y lo hace sin que la que fuera responsable de las obras hidráulicas en 2011, momento de aprobación de las obras en el Poyo, haya pisado la zona cero de la tragedia pese a que lo prometiera meses atrás.
15 años sin obras
Pese a hablar durante toda su intervención de la prevención y protección ante el cambio climático, no ha hecho mención en ningún momento a las obras antirriadas no ejecutadas en la cuenca del Poyo, las cuales estaban aprobadas desde el año 2011, cuando ella era ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico.
La gestión de su cartera tuvo un papel clave en lo que ocurrió el 29 de octubre de 2024 y se pudo haber evitado si su departamento hubiera autorizado unas obras de encauzamiento que hubieran costado 240 millones de euros, tal y como han asegurado los expertos.
Su ministerio es el máximo responsable de los cauces que discurren por toda España, así como de su adecuación y mantenimiento.
Pero desde que ocurrió la tragedia, la ahora vicepresidenta primera y comisaria de Competencia en la Comisión Europea (pasó a ocupar este cargo un mes después de la dana) tan solo se ha pronunciado dos veces sobre lo ocurrido, este miércoles por tercera ocasión.
La primera ocasión, en el Congreso de los Diputados, en una intervención que duró apenas ocho minutos para responder a las preguntas de la oposición y en la que se limitó a censurar la actuación de la Generalitat Valenciana.
Además, subrayó que "por supuesto" visitaría Valencia y la zona cero de la dana para comprobar de primera mano la magnitud de lo ocurrido. Algo que más de un año después todavía no ha ocurrido.
La segunda, en el Senado esa misma tarde. En 40 minutos enumeró protocolos, competencias que tiene atribuidas cada administración, y cómo actuó la Aemet y la CHJ la tarde de la dana.
Nuevo sistema de emergencias
La exministra ha instado a "favorecer un servicio de alerta de emergencias por satélite a través del sistema 'Galileo' que actúe de forma coherente en todo el territorio de la Unión Europea".
Ribera ha equiparado este sistema con el 112. Para ella, hay que ver "de qué forma podemos ir simplificando y casi hacerlo de forma automática con el paso del tiempo".
Sin embargo, pese a la propuesta de este nuevo sistema para el territorio, también ha querido recordar que no es que "no existiera". "Que a nadie se le ocurra decir que esta es la confirmación de que no existía; existía", ha advertido.
A lo largo de su intervención, ha hecho hincapié en el cambio climático como "el gran desafío" que enfrenta la sociedad.
"Eliminar de las políticas públicas el análisis, el seguimiento y la precaución no puede ocurrir, negar una realidad es el primer paso para tener problemas", ha asegurado.
Finalmente, ha querido reflexionar sobre el impacto del cambio climático para afrontar nuevas emergencias como la dana del pasado 2024.
"Cuánto más conozcamos, mejor preparados estemos y mejor coordinados estemos, mayor capacidad tendremos para afrontar riesgos que difícilmente van a dejar de existir", ha concluido.