
Cecilia Herrero durante una rueda de prensa. EFE/Biel Aliño
Cecilia Herrero, la edil de Vox en Valencia cerca del banquillo: llama "salvajes" a los "africanos" y compara a Echenique y Hitler
Tras sus idas y venidas del grupo municipal de extrema derecha, la investigación de la Fiscalía por presuntos delitos de odio pone a la concejala en el punto de mira.
Más información: El Gobierno municipal de Valencia, en peligro: Cecilia Herrero abandona Vox tras la expulsión de Badenas, su pareja
Cecilia Herrero, concejala de Vox en el Ayuntamiento de Valencia, forma parte de uno de los tándems políticos más incómodos del PP con la formación de Santiago Abascal.
Los duros y mediáticos perfiles de la edil y de su pareja sentimental y exportavoz del Consistorio, Juanma Badenas, han complicado en sendas ocasiones la gobernabilidad de la ciudad.
Tras sus idas y venidas del grupo municipal de extrema derecha, del que incluso ambos llegaron a darse de baja el pasado mes de marzo para luego regresar, Herrero ha vuelto a situarse una vez más en el punto de mira.
Esta vez, por sus publicaciones y tuits racistas en redes sociales. Comentarios que, de hecho, investiga la Fiscalía por presuntos delitos de odio tras haber sido denunciados por Compromís.
"Los moros nos invaden", "basta de patrocinar al moro" o "expulsión ya de inmigrantes y del Gobierno en la misma patera" rezan algunos de los mensajes que esta concejal compartió en Twitter entre 2020 y 2024.
Pese a la apertura de diligencias de la Fiscalía, su autora niega que sea racista y asegura que estos mensajes están descontextualizados, que muchos de ellos son respuestas a noticias sobre asuntos graves como violaciones grupales.
Pero sin duda, la investigación abierta ha vuelto a situar en el foco mediático -para mal- a miembros del equipo de gobierno local que lidera la popular María José Catalá.
Y ocurre apenas unas semanas después de que el Ayuntamiento de Valencia fuera noticia tras la entrada de la UCO al consistorio para buscar contratos de la fundación Valencia Activa durante la etapa que fue dirigida por Badenas.
Las crisis y bretes en los que se ha encontrado la alcaldesa a cuenta de estos dos ediles han sido numerosas. De hecho, nada más comenzar la legislatura, Badenas llegó a afirmar que Catalá no tenía "ni idea de la acción política" por demorar cuatro meses su pacto con Vox.
También tuvieron encontronazos posteriores por la Capitalidad Verde Europea de 2024 o los Gay Games que va a acoger la capital del Turia. Sin embargo, en los últimos meses los problemas han surgido sido más recurrentes y han adquirido mayor envergadura.
El pasado 6 de marzo, Herrero solicitó "la baja voluntaria de militancia" tres días después de que Vox expulsara temporalmente a Badenas por el presunto amaño de un contrato en favor de una empresa en la que trabaja Javier Cebrián, el marido de la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, la socialista Pilar Bernabé.

Juanma Badenas y Cecilia Herrero. EFE/Biel Aliño
Días después, la edil concedió una rueda de prensa para explicar que no dejaría su acta de concejal y los motivos por los que abandonó la militancia del partido. En sus declaraciones quedaron reflejadas las reticencias internas con el resto del partido, afirmando que ha sufrido "mobbing laboral por parte de uno de los asesores del partido" y "burlas".
Pero, sobre todo, criticó la "falta de apoyo legal y personal" del partido "ante un proceso penal por una denuncia por delito de odio", causa que en estos momentos tiene todas las papeletas para sentarla en el banquillo.
Según el magistrado encargado de la causa judicial, existen "suficientes indicios de criminalidad" contra la investigada. Además, ha descartado el sobreseimiento, lo que acerca a Herrero al juicio oral.
Mensajes de odio
En el auto, de principios de junio, el instructor recoge 28 mensajes publicados en la red social X por la edil, entre 2020 y 2024.
Uno de los últimos comentarios y ataques racistas tuvo lugar el pasado año, cuando el exdiputado de Podemos en Madrid, Serigne Mbayé, compartió vídeos ofensivos de Daniel Esteve, líder de Desokupa, en los que cuestionaba: "¿No parece que le falta algo o solo me lo parece a mí?".
A este mensaje, la edil de Vox respondió: "Sí. Falta que te vuelvas a tu país", declaraciones que provocaron la reacción en tromba de la oposición al gobierno municipal.
Què més has de parar-te a pensar senyora Catalá? 🤔 https://t.co/sLd6y4WKyl
— Compromís València (@CompromisVLC) May 15, 2024
Los mensajes publicados en la red X no solo tienen tintes racistas, ya que la concejala de Vox también comparte diferentes contenidos polémicos: "Ya le gustaría a Hitler ser la mitad de malvado que Echenique" o "Sánchez se ha ido a Portugal para comprar toallas para las saunas gays del suegro. Era urgente. Ahora lo entendéis, ¿verdad?".
Compromís puso en conocimiento de la Fiscalía los mensajes y el PSPV llevó al pleno municipal una moción por la que pedía al PP y a la alcaldesa la reprobación de la concejala del partido de extrema derecha. Algo que no ha ocurrido.
Gobernabilidad municipal
Esta situación repercute de manera irremediable en el gobierno municipal de María José Catalá. El último episodio de esta incómoda alianza con ambos concejales, que regresaron a las filas del partido a principios del mes de abril, tuvo lugar durante la votación de dos mociones de la oposición relativas a la Ley Trans.
Tanto Herrero como Badenas se ausentaron del pleno municipal del 27 de mayo, lo que provocó que PP y Vox quedaran en minoría frente a Compromís y PSPV, que sacaron adelante las mociones por un voto más.
En esta votación quedaron expuestos los meses de desacuerdo y desconcierto en el gobierno municipal como consecuencia de las desavenencias entre Cecilia Herrero y Juanma Badenas con la formación política de Abascal.
Tanto Badenas como Herrero tenían un gran peso en el grupo municipal de Vox, pues uno era el portavoz y Herrero daría los mismos pasos que él, lo que supondría que cualquier movimiento por parte de ambos, dejarían a Catalá en minoría.
Badenas es catedrático de Derecho Civil, un perfil teórico que desembarca en la política convencido de que es el único camino para atajar el retroceso de la libertad.
Por su parte, Herrero, funcionaria del Ayuntamiento de Valencia, se enroló en la misma causa tras su efervescente militancia en las redes sociales, plataforma en la que sus comentarios la han puesto bajo la amenaza del banquillo.