
Bajos turísticos en Valencia. Rober Solsona / Europa Press
Aluvión en Valencia de bajos turísticos en venta: el fenómeno que se produce en Idealista por temor a la retirada de licencias
En la provincia ya se han clausurado 1.762 viviendas de uso vacacional, más de 1.000 en la capital.
Más información: El Ayuntamiento de Valencia lo confirma: clausurados más de 1.000 apartamentos turísticos ilegales en la ciudad
"Perfecto para inversores", "listo para explotar" y "gran oportunidad" son algunas de las frases que definen las más de 450 ofertas de bajos turísticos en venta que figuran en Idealista.
Estos pisos se encuentran distribuidos por diversos barrios de Valencia como En Corts, El Pilar, Ciutat Jardí y La Roqueta, entre otros. En la provincia ya se han clausurado 1.762 viviendas de uso turístico, más de 1.000 en la ciudad de Valencia.
Además, la mayoría tienen algunas características en común: suelen ser de pocos metros cuadrados, recién reformados o de estética moderna, prácticamente no tienen luz solar, poseen licencia turística y salieron a la venta hace escasas semanas.
Pero, ¿por qué un propietario querría deshacerse de un inmueble al que le puede sacar una gran rentabilidad? ¿Por qué no continuar explotándolo en lugar de venderlo por una cantidad fija de dinero?
La razón por la que presuntamente se encuentran a la venta numerosos bajos residenciales en Valencia es por el miedo de los propietarios ante la nueva normativa vigente.
La ley 9/2024 establece una modificación de la normativa reguladora de las viviendas de uso turístico, y fue aprobada el pasado mes de agosto. Así, los pisos y bajos que no cumplen con los nuevos requisitos serán clausurados.
En esta ley se destacan algunos de esos requisitos: "Relación entre los distintos espacios o recintos, dimensiones lineales, circulaciones horizontales y verticales, huecos de ventilación e iluminación, aparcamientos e iluminación y ventilación de las viviendas y el edificio".
Algunos de los bajos en venta en Idealista sí que marcan la diferencia. Son bastante más amplios, cuentan con terrazas y piscinas y en su oferta no se destaca que sean para destinar al alquiler vacacional. Es más, las imágenes invitan a intuir que se trata de un hogar.
En cambio, muchas otras ofertas rondan entre los 40 y los 60 metros cuadrados. Las únicas ventanas que tienen son pequeñas además de, en ocasiones, la propia puerta del inmueble. Y todas ellas de cristal traslúcido para mantener la privacidad del interior y no parecer un escaparate.
Ahora, todos aquellos pisos y bajos que no cuenten con la licencia y cumplan con los requisitos deberán ser clausurados, y no solo bastará con estar inscritos en el Registro de Viviendas de Uso Turístico de la Generalitat.
La presidenta de la Asociación de Inmobiliarias de la Comunitat Valenciana (Asicval), Nora García, subraya que "esta tendencia viene produciéndose desde hace algunos meses": "Sospechamos que se trata de propietarios que no tienen licencia y saben que no la van a tener".
"Puede que quieran vender los bajos para recuperar la inversión y para pasarle el problema a otra persona", explica García. "Quien venga detrás no va a poder sacarle tanta rentabilidad al bajo porque no va a tener licencia turística".
La clausura
Esta semana, la Generalitat Valenciana informaba de que la Dirección General de Turismo de la Comunitat Valenciana había dado de baja 10.601 viviendas de uso turístico inscritas en el Registro de Turismo de la región.
La decisión venía motivada por la falta de referencia catastral única e individualizada de estos pisos, que se unen así a las 886 viviendas de uso turístico que se dieron de baja el pasado mes de marzo por carecer de NIF/NIE.
Por provincias, un total de 1.762 viviendas de uso turístico en la provincia de Valencia, 7.438 en Alicante y, en la provincia de Castellón, 1.401 viviendas.
Además, a finales de mayo el Ayuntamiento de Valencia ya sacaba pecho ante sus más de 1.000 apartamentos turísticos ilegales clausurados desde que llegaron al gobierno, algo que atribuyen a la "labor inspectora" realizada desde las áreas de Urbanismo y Policía Local del consistorio.
También al impulso de una moratoria en la concesión de licencias de viviendas de uso turístico en todos los distritos de la ciudad, que se extenderá hasta que se apruebe una nueva normativa reguladora