Personal sanitario atendiendo a un paciente en la UCI.
Muere el hombre que contrajo la rabia en Etiopía tras haber estado hospitalizado en la UCI en Valencia
Al paciente se le suministró la inmunoglobulina antirrábica durante su ingreso.
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El paciente de 44 años que contrajo la rabia tras haber sufrido la mordedura de un perro durante un viaje a Etiopía ha fallecido este viernes.
El hombre permanecía aislado desde esta semana en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de un centro hospitalario de la Comunitat Valenciana.
El fallecido, que no estaba vacunado contra la enfermedad, fue mordido por un perro en África en julio de 2024.
Las pruebas analíticas se confirmaron como positivas frente a la rabia por parte del Centro Nacional de Microbiología el pasado 29 de mayo.
El conseller de Sanidad, Marciano Gómez, aseguró este jueves que el paciente, al que se suministró la inmunoglobulina antirrábica durante su ingreso en el hospital, era un caso "excepcional" y estaba "muy grave".
Gómez lanzó este jueves un mensaje de tranquilidad, incidiendo en que en España la rabia está erradicada y "se transmite por mordeduras de animales infectados en países donde no está controlada y excepcionalmente por gotas de saliva o alguna úlcera conjuntival".
Por ello, recalca la importancia de que las personas que viajen al extranjero o vayan a tener acciones de riesgo con animales se vacunen.
La rabia es un proceso que, desde el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación califican "de carácter agudo", afecta al sistema nervioso central y puede "provocar la muerte si no es tratada con máxima urgencia".
Fuentes de la conselleria han apuntado que la rabia se transmite habitualmente por mordeduras de animales infectados en países donde no está controlada, y la transmisión entre humanos es "muy excepcional".
Aunque el periodo de incubación de la rabia suele durar entre 2 y 8 semanas, estos intervalos de tiempo pueden variar. Así, podría manifestarse en tan solo cinco días o tardar incluso un año.
En el caso de este hombre, ha tardado más de lo habitual. Esto podría deberse a la zona en la que se localiza la herida, pues este periodo de incubación varía en función de la cantidad de tejido nervioso afectado y su distancia al cerebro.
Se trata del primer caso confirmado en España desde 1978, cuando se comenzó a considerar erradicada tanto en la península como en las islas.
Bien es cierto que en las ciudades autónomas, Ceuta y Melilla, pueden darse casos esporádicos, aunque se realizan campañas de vacunación obligatorias para prevenir y controlar la enfermedad.
