Un feroz tiroteo en una instalación del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de los Estados Unidos (ICE) en Dallas, Texas, terminó con la vida de 2 migrantes, lo que ha encendido la discusión sobre la falta de protección dentro de los centros del ICE.
¿Qué ocurrió en la instalación del ICE en Dallas?
El segundo de los 2 migrantes fallecidos fue identificado como Miguel Ángel García-Hernández, un mexicano de 32 años. De acuerdo con Fox News, él había recibido un disparo en el ataque ocurrido en la instalación del ICE en Dallas y permaneció conectado a soporte vital hasta que no resistió más.
Su esposa, Stephany Gauffeny, declaró: “Me llamaron, ‘Tu esposo está en el hospital y está vivo. Eso es todo lo que sabemos. Ve al hospital’”.
El ataque también dejó como víctima mortal a Norlan Guzmán-Fuentes, de 37 años, quien perdió la vida poco después del tiroteo. El FBI señaló que se trató de un acto de violencia dirigido contra el centro de detención en medio de maniobras “anti-ICE”.
La familia exige justicia tras el tiroteo “anti-ICE”
La viuda de García-Hernández subrayó la necesidad de mayor protección para quienes se encuentran bajo custodia del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de los Estados Unidos.
“Para que esto no vuelva a pasar. Que se prevengan este tipo de ataques. Que los detenidos tengan más protección si están bajo su custodia”, dijo Gauffeny.
El segundo migrante fallecido deja a su esposa, cuatro hijos pequeños y un quinto bebé en camino. La familia inició una recaudación para cubrir gastos médicos y de manutención, ya que él era el único proveedor del hogar.
“Solo quiero que la gente sepa. Ponerle un rostro a un nombre. Era más que una víctima, era una persona real”, pidió su esposa.
Según el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), García-Hernández tenía antecedentes por dar información falsa, evadir arresto y manejar en estado de ebriedad.
