El precio del café en Estados Unidos registró en agosto un incremento de casi 21% respecto al mismo mes del año pasado. Se trata del mayor salto anual desde 1997. En gran parte, este fuerte aumento se debe a los aranceles impulsados por el presidente Donald Trump, que golpean directamente a los principales países exportadores del grano.
Los aranceles de Trump impactan al café importado en Estados Unidos
Estados Unidos consume casi en su totalidad café importado, ya que no cuenta con zonas productivas suficientes. Brasil, principal proveedor del país, enfrenta un arancel del 50%, uno de los más altos aplicados por Washington. Colombia, segundo exportador hacia Estados Unidos, afronta un 10% de arancel, mientras que Vietnam, en tercer lugar, tiene un 20%.
Según la economista Diane Swonk de KPMG, los precios podrían superar los récords históricos en los próximos meses, a medida que los efectos de estas tarifas se reflejen en supermercados y cafeterías.
Consumidores y marcas ya sienten el golpe
J.M. Smucker, dueña de Folgers y Café Bustelo, confirmó que subirá los precios por tercera vez este invierno, luego de ajustes en mayo y agosto.
En Nueva Orleans, la cadena French Truck Coffee aplicó un recargo del 4% en sus pedidos para cubrir el costo adicional de las importaciones. En contraste, Starbucks aseguró que su estrategia de compras le permite retrasar el impacto, aunque prevé aumentos para 2026.
