Águeda Ubeira, CEO de Vanetta: "Aún siendo vegana, entiendo el escepticismo hacia la palabra vegano"
Águeda Ubeira, CEO de Vanetta: "Aún siendo vegana, entiendo el escepticismo hacia la palabra vegano"
Nacida durante la pandemia para ofrecer comida tradicional, pero plant based, la startup gallega ha revolucionado el mercado de la comida hecha con proteína vegetal con su "zorza" y sus "cachopos" veganos. Su cofundadora reconoce que el 80% de sus clientes "no son ni veganos ni vegetarianos"
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Vanetta Food nació de la mano de la viguesa Águeda Ubeira durante la pandemia, después de fracasar un negocio de hostelería de comida plant-based. "Nos arruinamos", confiesa.
Lo cierto es que esta startup con sede en Nigrán ha sabido salir al mercado de manera exitosa con una propuesta que ha llegado para revolucionar la comida tradicional: zorza hecha con soja o cachopos, todo bajo el mando de la proteína vegetal, ya que "sabemos que tenemos que reducir el consumo de carne".
En Águeda se da una contradicción: vegana, entiende que esa palabra genere desconfianza, sobre todo porque muchos productos se han lanzado al mercado "por moda", pero sin atender a los estándares de calidad que hace que, en el caso de Vanetta, el 80% de sus clientes no sean ni veganos ni vegetarianos.
Además, durante el último año, la cofundadora de Vanetta se ha hecho cargo de la presidencia de la Asociación de Jóvenes Empresarios de Vigo (AJE).
Llevas más de una década en el sector agroalimentario plant-based y hoy Vanetta es referencia en “zorza” y “cachopo” veganos. ¿Cuál fue el momento exacto en el que viste claro que había hueco para recuperar la tradición culinaria gallega en versión 100% vegetal y cómo se convirtió esa intuición en una empresa real?
Yo creo en su momento fue más un suicidio, casi que lo de decir a priori que lo veía clarísimo y "es algo que tengo que hacer". Al final era un suicidio llevado a cabo por el COVID y había que buscarse la vida fuese como fuese. Después de arruinarnos montando un restaurante sin ser hosteleros y sin tener ni idea de hostelería empezamos a buscar alternativas diferentes a las que había en el mercado para tener más cuota de mercado y poder ofrecer una comida que fuese lo que me comería yo saliendo fuera de casa.
Águeda Ubeira, CEO de Vanetta.
Vuestro discurso mezcla tradición, innovación y sostenibilidad, pero muchos consumidores siguen siendo escépticos con lo “vegano”. ¿Qué has aprendido sobre cómo comunicar un producto plant-based para que lo abracen también los omnívoros que “no quieren renunciar al sabor de siempre” y en caso de Galicia en una tierra tan amante y casi dependiente del cerdo?
Por eso empecé diciendo que era un suicidio al principio, pero al final yo creo que hemos llegado a un momento de comunicación que no utilizamos el concepto "vegano" nunca. Nosotros hacemos comida con proteína vegetal que está rica y que cualquiera se la puede comer. El 80% de nuestros clientes no son ni veganos ni vegetarianos, pero yo entiendo el escepticismo hacia la palabra vegano, siendo vegana.
Sí que es cierto que nos han vendido y nos siguen vendiendo muchas veces productos que son infumables, que llegan al mercado y que después no prosperan, pero es que ¿quién se comía eso? ¿Qué análisis de mercado pasó? Al final, se hace a través de una comunicación diferente basada en productos saludables y ricos. Además, yo creo que, por mucho que a todos y a todas nos guste comer cerdo, comer ternera o cualquier otro tipo de carne, sabemos que tenemos que reducir el consumo de carne.
"Es cierto que nos han vendido y nos siguen vendiendo muchas veces productos que son infumables"
Vanetta ha pasado de una idea emprendida desde Nigrán a cerrar inversión y aparecer en medios nacionales. ¿Cuáles han sido los mayores retos de escalar una startup foodtech desde Galicia y qué decisiones estratégicas han sido clave para ganar visibilidad y crecer?
Yo creo que la única decisión estratégica que puedo decir que hemos tomado es ser auténticos desde el minuto uno e intentar rodearnos de personas que quisieran aportar. ¿Que desde Galicia es más difícil despegar una startup? Lo pienso y lo creo, aunque a veces doy titulares que no gustan, pero es la realidad. Es mucho más fácil en Madrid o en Barcelona, pero porque hay más ecosistema, hay más sitios donde te escuchan y donde te entienden, gente que se mueve en ese en ese ámbito. Pero por el resto, yo creo que lo único que hemos hecho es ser muy humildes en espíritu y trasladarlo hacia hacia la empresa.
Habéis desarrollado desde zorza de soja texturizada hasta cachopos, croquetas y proyectos más tecnológicos como un filete vegetal apto para personas con disfagia. ¿Cómo priorizáis en el equipo qué productos lanzar y hacia dónde te gustaría que evolucionara el portfolio de Vanetta en los próximos cinco años?
Águeda Ubeira, CEO de Vanetta.
Evidentemente, nunca perdemos la orientación del producto. Para nosotros es un eje principal, pero sin dejar de escuchar al cliente, que yo creo que es algo que también fue la clave de que Vanetta prosperase. Aunque el cliente no es quien debe dictaminar siempre qué producto es bueno o no.
¿Y dónde nos veo? Pues teniendo una cuota de mercado asumible y compitiendo cada vez más con otros players del mercado que ya nos han aceptado como contrincantes, y estar en la cesta de la compra de muchas personas.
En tu perfil se habla de ti como mujer, madre y emprendedora, con varios reconocimientos a tu trayectoria. ¿Qué barreras reales te has encontrado por el hecho de ser mujer en el ecosistema empresarial y qué cambios crees que son urgentes para que más mujeres se animen a liderar proyectos como Vanetta?
Aquí abrimos bastantes melones; solamente el 13% de las startups son fundadas por mujeres. De ese 13%, todavía hay un gran volumen de startups que deciden después contratar a un CEO hombre, que no sé qué necesidad hay de esto. Sí que es cierto que, aunque yo no he notado machismo, sí que hay muchos ambientes todavía muy masculinizados. A mí todavía me rechina llegar a una reunión o a una exposición de una empresa o de algunos clúster y que todos los que están sentados sean hombres.
" Aunque yo no he notado machismo, sí que hay muchos ambientes todavía muy masculinizados"
Digo yo, ¿no hay ninguna mujer que de verdad que sea merecedora de ese puesto? Sí que es cierto que me he encontrado algo de condescendencia y de paternalismo. A ver, soy la CEO de Vanetta, no te estoy pidiendo ningún favor, no soy una niña. Pero bueno, yo creo que también es porque todavía, y hablo desde la perspectiva de Galicia, en muchas empresas todavía no ha habido ese cambio generacional, que también influye.
Como presidenta de AJE Vigo, te has marcado el reto de aumentar la base de socios y revalorizar la imagen de la asociación. Desde tu perspectiva, ¿qué papel debería jugar AJE en los próximos años para que Vigo y el sur de Pontevedra consoliden un ecosistema emprendedor potente, y qué le falta todavía a la ciudad para estar al nivel de otros polos de innovación en España?
Creo que estamos en una ciudad privilegiada para emprender por muchos motivos, por todo el apoyo público que hay. No sólo económico, sino en espacios. Igual que decía que en Madrid y Barcelona hay más ecosistema, aquí puedes hablar de tú a tú con muchas personas, altos cargos y pedirles ayuda.
Tenemos una tasa de emprendimiento muy alto frente a otras ciudades, y yo creo que también tenemos un carácter como vigueses y viguesas de pelear y de luchar por nuestras ideas. Yo creo que desde AJE, durante este año que ahora cumplo como presidenta, sí que hemos mejorado muchísimo en exposición pública de la asociación. Yo he ido a muchos eventos este año, y porque no me puedo multiplicar y digo a otros muchos que no, pero que es algo necesario, que se nos vea, que se nos escuche y que se nos valore.
"Estamos en una ciudad privilegiada para emprender por muchos motivos, por todo el apoyo público que hay"
La prensa nos llama para dar nuestra valoración, entre otras asociaciones empresariales, y eso sirve para darte cuenta de que también somos válidos y válidas para eso. A AJE la veo siendo uno de los principales ejes en la ciudad a la hora de emprender; que una persona que quiera emprender venga a nosotros, ya no sólo para asociarse, sino para hacer una consulta, conocernos y ayudarnos los unos a los otros, que al final es lo más importante.
