La edición de este martes del programa de RTVE La Revuelta fue en "modo avión": con iluminación baja y sin público, después de que la televisión pública decidiese no emitirlo el lunes "porque gastaba mucha luz". En esta excepcional situación, el invitado fue el delantero del Celta, Borja Iglesias.
"Un disfrutón", como lo definió David Broncano, aunque el gallego ha reconocido que, a pesar de que ahora tener un nivel de felicidad "alto", hace dos años pasó por malos momentos porque estuvo "desencantado" con su profesión.