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De los molinos da Fraga al Monte Faro: Moaña a través de sus rutas de senderismo

Sendas fluviales, litorales e incluso literarias atraviesan el grueso de la localidad y permiten a sus visitantes descubrir la historia, paisajes y etnografía de Moaña
Ruta forestal paralela al río da Fraga, Moaña.
Ruta forestal paralela al río da Fraga, Moaña.
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Moaña alberga toda la esencia de las localidades costeras de las Rías Baixas, de sus contrastes entre paisajes de mar y montaña, naturaleza autóctona y un extenso patrimonio histórico y etnográfico a todos los niveles. Una de las mejores formas de descubrir la riqueza que esconde este municipio pontevedrés es hacerlo a través de sus rutas de senderismo, ya que existen multitud de sendas que atraviesan el grueso del territorio desde el litoral hasta las zonas más elevadas, entre ellos el río da Fraga y sus molinos restaurados o el Monte do Faro y la red de miradores que se sitúan en la cima de este sistema montañoso. 

Ruta del río Fraga

Ruta del río da Fraga, Moaña. Foto: TripAdvisor

Un agradable paseo a orillas del río da Fraga permite a sus caminantes descubrir las huellas de la molienda en Moaña. Esta senda fluvial recorre la localidad moañesa de sur a norte desde el nacimiento del río en el Monte Xaxán, a más de 600 metros de altitud. A lo largo de cerca de 10 kilómetros, la vía discurre entre frondosos bosques de ribeira, pequeñas cascadas,  pozas naturales y hasta una treintena de antiguos molinos de agua, muchos de ellos restaurados. Uno de los elementos más característicos y singulares de la ruta lo conforma el llamado "árbol de los deseos", una especie centenaria a la que muchos visitan esperando cumplir sus mayores anhelos. 

Ruta del río Freixa e da Miñouba

Antiguo molino en la ruta del río Freixa e da Miñouba. Foto: Wikimedia

Otra senda fluvial imprescindible en Moaña se encuentra en los límites de la parroquia de Domaio, la conocida como ruta del río Freixa e da Miñouba, cuya riqueza se eleva gracias al importante valor histórico y cultural del entorno que recorre a lo largo de 7 kilómetros. El trayecto da comienzo junto al arenal do Almacén, avanza hacia la ensenada de Mouro para más tarde continuar bordeando el río Freixa y su cojunto de molinos en diferentes estados de conservación. El sendero se adentra más adelante en el Souta das Camelias y otros puntos de interés como el mirador de la Ensenada de San Simón o la famosa Poza da Moura.    

Ruta del Monte Faro

Mirador Monte do Faro. Foto: Thalia García.

El puerto de Moaña es el punto de partida de esta ruta que asciende desde la costa hasta el área recreativa de Chan da Arquiña, a los pies del Monte Faro. Esta senda también permite tomar un desvío para visitar la zona de la Poza da Moura y sus molinos de agua, si bien el gran atractivo de la ruta lo conforma la red de miradores ubicados en la parte más alta del sistema montañoso, a unos 627 metros de altura sobre el nivel del mar. Destaca un curioso mirador con manos giratorias para contemplar la ría de Vigo y la riqueza histórica de Chan da Arquiña, lugar donde todavía se conservan los restos de un dolmen semienterrado y la mámo que cubría el monumento, construidos hace más de 5.000 años. 

Ruta del Monte Paralaia

Monte da Paralaia, Moaña. Foto: Turismo Rías Baixas

La cima del Monte Paralaia se encuentra ligada a numerosas historias y mitos sobre mouras, princesas y pasadizos subterráneos. La vía más directa para alcanzar ese mirador natural parte del área recreativa do Outeiro, una zona habilitada con mesas y bancos de piedra convertida en un lugar ideal para disfrutar de la naturaleza. La cumbre del Monte Paralaia se encuentra coronada por la Cruz do Xestoso y un banco con unas espectaculares vistas de la ría de Vigo, las islas Cíes y gran parte de la península do Morrazo

Sendero de la Costa de Tirán

Iglesia de San Xoán de Tirán en Moaña. Foto: Turismo Rías Baixas

Una ruta literaria y litoral: así es el sendero de la Costa de Tirán en Moaña. El itinerario transcurre paralelo a las playas de la costa moañesa, desde la zona del puerto pesquero hasta el límite con el municipio de Cangas. Esta senda permite a viandantes y ciclistas ―ya que ha sido habilitada para ello― descubrir algunos miradores del Morrazo, como la balconada da Mona con vistas a la ría de Vigo o el conocido monte de Ramil. El sendero también atraviesa varios escenarios literarios presentes en las páginas del libro O último barco (2019) de Domingo Villar, entre ellos los alrededores de la Iglesia de San Xoán de Tirán o el arenal de Videira o la fuente do Cristo das Boas Augas.   

Sendero de Rialdarca

Señalización del Sendeiro Rialdarca. Foto: Wikiloc

La riquezaa patrimonial y paisajística de Moaña también se ve reflejada en el grueso del sendero de Rialdarca, una ruta que avanza entre antiguos molinos e historias del rural. El punto de partida de este pequeño itinerario de apenas 2,4 kilómetros en total da comienzo en el centro de la localidad y sigue el cauce del río dejando a su paso una estampa de pequeñas cascadas, vegetación de ribera e importantes elementos etnográficos. Además, el sendero en cuestión fue durante mucho tiempo una vía de comunicación muy utilizada entre el centro neurálgico de la localidad y los barrios altos, más próximos a San Martiño, dentro de una zona de gran actividad agraria, de la molienda y utilizada para el lavado tradicional.    

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