Comienza la Navidad en Vigo: "Habrá una estrella de 14 metros que se verá desde Nueva York"
Esta mañana, bajo un sol abrasador y con el calendario marcando un día que no parece correcto, el alcalde de Vigo ha inaugurado la instalación del encendido navideño. Los camiones de Luces Ximénez presidían la fachada del Museo Marco llamando la atención de los viandantes, que se giraban con sorpresa al apreciar que allí mismo había luces de Navidad.
Abel Caballero adelantó algunas de las novedades de la próxima Navidad viguesa y confirmó la presencia de atracciones clásicas como la noria. La ornamentación cambiará como cada año y habrá una gran estrella con una cola de 14 metros de longitud en la calle Príncipe: "Vamos a ponerla de tal modo que se vea desde Nueva York, para que el alcalde de allí vea cómo le ganamos en esto holgadamente".
El encendido será en noviembre, todavía sin fecha concreta. El número de luces se mantiene en 11 millones de LED y el número de calles iluminadas gira en torno a las 400.
Caballero desveló que ya le consta que existe "un número importante de reservas hoteleras", así como demanda por parte de las agencias de viajes para conocer los detalles del alumbrado y organizar visitas guiadas.
Gasto energético
El regidor vigués se adelantó a las preguntas de los periodistas sobre el consumo energético de las luces de Navidad, una cuestión de recurrente polémica. "La Navidad de Vigo desde que encendemos hasta que apagamos consume menos que el gasto energético normal de un campo de fútbol de 30.000 espectadores en el mes de enero", explicó.
Además, concretó que el coste del año pasado fue de 30.000 euros y que esta edición no ascenderá demasiado la cifra. En comparación con el gasto del alumbrado total de la ciudad, "menos del 0,5%" responden al de la Navidad, de acuerdo con las explicaciones de Caballero.
Para adaptarse a las medidas de ahorro energético del Gobierno de España, el Concello de Vigo encenderá las luces a las 18:30 horas (media hora más tarde) y las apagará a las 00:30 horas (media hora antes). De este modo, la ciudad espera reducir un 14% su consumo, superando la cifra recomendada por el Ejecutivo central, que es del 7%.
