"Roca Rey, Juli, Manzanares o Pablo Aguado se han negado a torear" el festival de la Fundación Toro de Lidia previsto para "el 28 de febrero", según han confirmado a este diario fuentes de la entidad. El festival era la actividad principal del Día de la Tauromaquia, que se celebró por primera vez en 2018 en Valencia. Su segunda edición está en el aire por culpa de la actitud de las figuras del toreo: se niegan a torear en beneficio de la Fundación Toro de Lidia. 

"Este es el compromiso real con el Día de la Tauromaquia", señalan las mismas fuentes anónimas. La Fundación obtuvo del festival en 2018 257.493 euros, un 78,9% del total del presupuesto gastado (326.000 euros). Lo que supuso algo más de la mitad (54,3%) del dinero que ingresó. "Los toreros se han quitado del festival".

"El día de la tauromaquia es vital para el sostenimiento financiero de la FTL y, además, la ausencia de los principales actores del sector nos causa problemas a la hora de demandar compromiso a los aficionados", advierten otras fuentes del patronato. "Difícilmente demos imagen de solidez exterior sin unidad", insisten desde el lobby taurino. 

El presupuesto con el que cuenta la Fundación está muy lejos del que manejan entidades parecidas, animalistas o no. Por ejemplo, el presupuesto de la Federación de Caza es "17 veces mayor" al de la Fundación Toro de Lidia, que utiliza el dinero para "defender a la fiesta de los ataques externos" y su "promoción". 

Alrededor de la corrida de toros, la FTL organizó en 2018 distintas actividades que enmarcó en una jornada dedicada al toreo bautizada como Día de la Tauromaquia, un reclamo para unir a los aficionados e intentar apuntalar la imagen de la fiesta. Cayetano, miembro del patronato como Juli, es el único torero que se habría mostrado interesado en torear este año.

En 2019, los toreros no pudieron organizarse para matar el festival a final de temporada, al coincidir las fechas planteadas con sus viajes a América, según informó Aplausos, por lo que se decidió retrasar el festival a principios de este año.

Tras descartarse octubre, la fecha elegida, el 28 de febrero, y la ciudad, Málaga, servían para "reforzar la apuesta de la Fundación por Andalucía", comunidad autónoma en la que se desarrollará, si todo sale según lo previsto, el proyecto más importante de la Fundación desde su nacimiento, clave para el futuro del sector. 

Juli, patrono, no torea

El caso más llamativo es el de Juli, que comparte patronazgo con su apoderado, Luisma Lozano, miembro de una de las familias mas influyentes en la industria taurina. "Se trata de un compromiso de trabajo beneficioso para la tauromaquia", explica Juli en la web de la organización su inclusión en el patronato. 

Pablo Aguado visitó la sede de la Fundación Toro de Lidia en Madrid como "profesional benefector" el pasado mes de octubre. En la lista publicada en 2018 de toreros colaboradores no aparecía su nombre.

"Roca Rey ha preferido reaparecer en España en una fecha más importante, es el único caso comprensible, el resto no tiene excusa". El matador de toros peruano se cayó a última hora del cartel de 2018, lo que provocó un gran revuelo.

"Promoción del toro"

La decisión de aplazar el Día de la Tauromaquia a febrero se hizo con el objetivo de contar con las figuras del toreo que, por ahora, pasan de la Fundación. El dinero obtenido en 2018 se utilizó para "la consolidación de la FTL como entidad civil" e "implementar el plan estratégico".

Parte del dinero recaudado se destinó a la Fundación de Oncohematología Infantil, en memoria de Adrián Hinojosa, el niño valenciano que quería ser torero y que murió en abril de 2017 a causa de un Sarcoma de Erwing a los 8 años de edad.

Victorino Martín, presidente de la FTL, insistió en que aquel "éxito consolida a la Fundación como herramienta de todos los taurinos, profesionales y aficionados", algo que ahora queda en entredicho.

En el primer Día de la Tauromaquia torearon Enrique Ponce, El Juli, José María Manzanares, Román Collado, Álvaro Lorenzo, el rejoneador Fermín Bohórquez y el novillero Borja Collado.