Una niña de cuatro años permanece ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) para ser intervenida de urgencia por varios golpes en la cabeza. El titular del juzgado número 3 de Zaragoza ha ordenado el ingreso en prisión tanto de su madre como de su actual pareja como responsables de las agresiones sufridas por la niña.

El ingreso tuvo lugar el pasado sábado, en el Hospital Infantil de Zaragoza. Los detenidos llamaron por teléfono durante la madrugada del sábado para pedir ayuda médica urgente. Cuando los técnicos sanitarios se presentaron en la vivienda, la madre les contó que su hija había sufrido una caída. Sin embargo, esta versión no encajó a los sanitarios. Cuando acabaron de estabilizar a la niña, informaron de lo sucedido a la Policía.

Según informa El Heraldo, la rapidez con la que fue asistida por el equipo médico del 061 y el trabajo de lo cirujanos ha permitido que la vida de la menor no esté en peligro y que su evolución sea positiva.

Fuentes policiales han asegurado que todavía no se puede descartar ninguna hipótesis, aunque hay indicios de que pueda tratarse de un caso de malos tratos, principalmente por el tipo de lesiones que presenta la niña. Además, durante sus declaraciones -tal y como ha podido averiguar el medio aragonés- uno de los tutores contó que la niña se había caído de la cama, mientras que el otro afirma que se cayó de la bañera. Ello ha llevado a recelar de sus versiones.