El hombre de 30 años que se ha suicidado este domingo al tirarse desde la azotea de un edificio de Plaza de Castilla, en Madrid, había matado antes a su padre y su tío, cuyos cadáveres presentan signos de violencia en su vivienda, ubicada en la localidad de Colmenarejo.

Las pruebas preliminares de las autopsias efectuadas a los cadáveres de los dos hermanos sexagenarios hallados el sábado en la localidad madrileña de Colmenarejo han determinado que las heridas que presentaban son de arma blanca, según han avanzado fuentes de la investigación.

Las mismas fuentes han confirmado que el presunto autor del doble homicidio, hijo y sobrino de las víctimas, y que se suicidó en Madrid el sábado por la mañana al arrojarse al vacío desde la azotea de un edificio de 22 plantas de la plaza de Castilla, presentaba también heridas en la mano derecha.

Los tres cadáveres fueron trasladados al Anatómico Forense de Madrid, donde este domingo se les ha practicado la autopsia y se está a la espera de los informes.

Los cuerpos de los dos hermanos fueron hallados por la Policía Nacional y la Guardia Civil en la casa de la persona que se suicidó en Madrid, que vivía en la urbanización Parque Azul de Colmenarejo donde residían también su padre y su tío, para tratar de localizar a algún familiar.

Al llegar al domicilio no respondía nadie y entonces solicitaron al juez la entrada y el registro en la vivienda, donde encontraron los cadáveres de dos personas: el padre y el tío del fallecido, nacidos en 1953 y 1959, respectivamente.

Se calcula que llevaban más de doce horas sin vida, según ha avanzado el diario El Mundo, que cita fuentes de la Comandancia de la Guardia Civil.

Fuentes del instituto armado han que en la primera inspección ocular no se halló ninguna nota del presunto autor del doble crimen.

El Ayuntamiento de Colmenarejo (9.000 habitantes) ha acordado para este lunes un día de luto oficial por los dos homicidios, y el próximo jueves se guardará un minuto de silencio antes del pleno municipa