Narciso es un nombre masculino de origen griego, cuyo significado es 'adormecimiento'. Hoy, en España, 5.433 hombres celebran su santo gracias a San Narciso de Jerusalén.

Cuando fue elegido obispo de Jerusalén tenía una avanzada edad. Eusebio cuenta que, en su tiempo, los cristianos de esta ciudad recordaban todavía algunos de los milagros del santo obispo. Por ejemplo cuando los diáconos no tuvieron aceite para las lámparas la víspera de la Pascua, San Narciso pidió que trajesen agua, se puso en oración y después mandó que la pusiesen en las lámparas. Así lo hicieron y el agua se transformó en aceite.

Algunos molestos por la severidad del santo, y por la disciplina que exigía en su diócesis, le acusaron de haber cometido un crimen. Para no ser causa de conflicto decidió retirarse a la soledad. Ya no se supo más de él hasta que, durante el gobierno de Gordio, apareció de nuevo. Como ya se sentía muy anciano para retomar el obispado, nombró a San Alejandro por coadjutor. Se dice que Narciso murió a los 116 años.

Este y otros santos son celebrados durante el 29 de octubre:

San Colmán de Kilmacduagh

San Dodón de Wallers

San Feliciano de Cartago

San Honorato de Vercelli

San Narciso de Gerona

San Teodario de Vienne

San Zenobio de Sidón

Beata Ángeles Ginard Martí

Beato Cayetano Errico

Beata María Restituta Kafka

Beato Miguel Rúa