Félix es un nombre masculino de origen latino, cuyo significado es 'aquel que se considera feliz o afortunado'. Hoy, en España, hombres celebran su santo gracias a San Félix de Nola.
Félix de Nola nació en Nola, en la actual Italia, en el siglo III, en el seno del Imperio Romano. Hijo de romanos procedentes de Siria, recibió desde pequeño educación cristiana. De hecho, abrazó el servicio apostólico desde muy joven.
Al morir su padre, repartió toda su herencia entre los más desfavorecidos y y fue ordenado sacerdote por el San Máximo, obispo de Nola.
Al iniciarse una severa persecución del Imperio a los cristianos, Máximo huyó al desierto y Félix ocupó su lugar. En consecuencia, Félix fue apresado, encarcelado y torturado. Cuando pensaba que iba a morir, un ángel le liberó de sus cadenas y le pidió que auxiliase al obispo San Máximo.
Sus oraciones, milagrosamente, sanaron al obispo, ya que aparecieron una uvas, cuyas gotas curaron a Máximo. Más tarde, Félix le sucedería en el puesto, en momento difícil y convulso para el cristianismo. Moriría pobre y al servicio de los más necesitados.
Este y otros santos son celebrados durante el 14 de enero:
San Dacio
San Eufrasio
San Fermín de Gévaudan
San Fulgencio obispo
San Glicerio diácono y mártir
Santa Nino
San Potito
Beato Odón de Novara
Beato Odorico de Pordenone Mattiuzzi
Beato Pedro Donders