Publicada

Las claves

Cada vez más españoles deciden abandonar el país y poner rumbo a Suiza en busca de oportunidades con condiciones laborales más interesantes. Muchos españoles han tomado esta decisión en los últimos años en la búsqueda de salarios más altos y un mejor nivel de vida.

Emigrar a Suiza también permite disfrutar de unas condiciones laborales más beneficiosas y mayor estabilidad en el mercado laboral, existiendo una infinidad de testimonios de personas que actualmente viven y trabajan en este país.

Este es el caso de Lukas Acedo, quien actualmente trabaja como asesor de seguros, pero que en una de sus publicaciones de TikTok (@lukas.acedo) ha explicado cuál ha sido su experiencia a su llegada a Suiza.

En uno de sus vídeos asegura que, aunque muchas personas creen que llegar a Suiza supone empezar ganando una fortuna desde el primer día, la realidad es muy diferente, y por este motivo ha comenzado explicando cómo ha sido su experiencia laboral en el país.

Su primer trabajo fue en la obra, donde percibía unos 5.000 euros al cambio, pero le suponía tener que trabajar muy duro. Luego, mientras aprendía alemán, trabajó en Zara a media jornada, lo que hizo que su sueldo bajase a unos 2.200 euros. Para completar sus ingresos, hacía turnos en una discoteca donde cobraba unos 250 euros por noche.

De esta manera, Lukas Acedo ha destacado que, si bien es cierto que en Suiza se gana bien, al principio cuesta mucho hacerse con un hueco, y mucho tiene que ver con la necesidad de adaptarse al idioma y al ritmo de vida, pero también a unos precios elevados.

Estos últimos hacen que, aunque los ingresos puedan parecer mucho más altos en España, va acorde al coste de la vida en Suiza, que es significativamente más elevado.

Suiza, destino favorito de los españoles

Cada vez son más los jóvenes españoles que deciden hacer las maletas para probar suerte fuera de España. El objetivo no es otro que el de obtener un puesto de trabajo mejor remunerado, lo que no siempre es posible en España.

Ante la gran dificultad existente en nuestro país para incluso acceder a la vivienda, irse al extranjero es una posibilidad cada vez más contemplada por los ciudadanos españoles, buscando así un nuevo lugar en el que vivir y trabajar.

Lo hacen en la mayoría de los casos para generar mayores ahorros e independencia, pero también para adquirir experiencia en otros idiomas e incluso para empaparse de la cultura y la propia experiencia de conocer cómo es la vida en otros rincones del planeta.

Aunque hay muchos destinos que se han erigido como la opción contemplada por los españoles para emigrar a ellos, Suiza se ha convertido en uno de los destinos favoritos por las enormes oportunidades laborales que ofrece, pero también por su calidad de vida.

¿Cómo es trabajar en Suiza?

Cuando una persona decide emigrar a Suiza una de las principales preguntas y preocupaciones tiene que ver con el poder encontrar trabajo y cómo será trabajar en este país siendo extranjero, lo que implica valorar diferentes aspectos.

Aunque sobre el papel, sobre todo por lo transmitido por muchos creadores de contenido a través de las redes sociales, todo pueda parecer perfecto, como la estabilidad laboral y los sueldos altos, hay que tener en cuenta otros aspectos que pueden hacer que no sea tan buena opción.

Hay que tener en cuenta el proceso que habrá que afrontar, así como el choque cultural, el idioma, las entrevistas en las que puede que no lo entiendas todo por completo, o simplemente currículums que no encajan. De esta forma, trabajar en Suiza siendo extranjero es posible, pero no siempre es fácil.

Entre los puntos positivos de trabajar en este país nos encontramos con la estabilidad y condiciones laborales. Suiza es uno de los países con mejores condiciones laborales del mundo, con salarios dignos, una fuerte seguridad social, una gran puntualidad, respeto por el tiempo libre y unas vacaciones generosas.

Además, en muchos entornos, sobre todo en empresas medianas y grandes, se valora mucho la eficiencia, la iniciativa y la responsabilidad individual, por lo que se ofrece una mayor autonomía para que cada trabajador pueda ofrecer su mayor rendimiento en el trabajo.

La tercera de las grandes ventajas es la posibilidad de disfrutar de una buena conciliación entre la vida personal y laboral. Por lo general, en Suiza se respeta el horario laboral, de forma que se sale del puesto de trabajo a la hora establecida. Además, los fines de semana y las vacaciones también se respetan.

Pese a todos estos beneficios, existen una serie de desventajas a considerar, comenzando por el hecho de que, aunque se hable inglés, en la mayoría de sectores se requiere el idioma local, ya sea francés, alemán suizo o italiano, e incluso a veces dos idiomas.

En muchas ofertas de trabajo se exige un nivel B2 o superior para poder optar al puesto, por lo que se exige comunicarse con claridad y seguridad, especialmente si se trata de salud, atención al cliente o ventas.

También se valora la formación local, la adaptación al sistema suizo y las referencias dentro del país, por lo que la experiencia no siempre es suficiente para acceder a un puesto de trabajo. Igualmente, el proceso de encontrar trabajo puede llevar meses, una situación para la que se debe estar preparado.