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Las claves

Burbuja inmobiliaria, sí; burbuja inmobiliaria, no. Quienes están en el primer 'bando', argumentan su análisis en que la vivienda ya lleva bastantes meses encareciéndose a doble dígito. Algo que sucedió en la última conocida, la del año 2007.

Si repasamos los últimos datos del INE, referido al segundo trimestre de 2025, hablan de un incremento anual del 12,7%. Sin embargo, hay quien todavía no ve el vaso medio lleno. “No estamos próximos a una burbuja inmobiliaria”, afirma María Matos, directora de Estudios de Fotocasa.

¿A qué se debe el encarecimiento? A un cóctel compuesto por “una demanda sólida, unas condiciones hipotecarias más favorables y una oferta muy limitada”.

¿Y por qué no estamos próximos a una burbuja? Según Matos, a que “las condiciones hipotecarias siguen siendo prudentes y se mantienen dentro de los criterios de solvencia exigidos por el Banco Central Europeo (BCE)”.

Eso sí, la experta tiene claro que, respecto al precio, “el crecimiento se acelera cada vez más”. Te contamos las razones de por qué será así.

Alta demanda

En este escenario, hay un protagonista que está jugando un papel destacado: el BCE. La senda de recortes iniciada en junio de 2024 se ha traducido en un descenso del Euríbor. Fruto de ello, un 21% de compradores que habían quedado fuera del mercado han retornado.

Además, “en muchos casos, resulta más barato comprar que alquilar”, subraya María Matos. Otro empujón más hacia la adquisición de vivienda. Sin embargo, hay un contrapeso que frena sus deseos.

Y ese no es otro que la subida de precios que viene produciéndose desde 2022, “lo que encarecerá aún más el encarecimiento como consecuencia del nuevo empuje de la demanda”.

Con todo, la demanda de compra sigue siendo muy alta. ¿Por qué? Matos enumera varios motivos como “una forma de ganar calidad de vida”. También, “el aumento de los flujos migratorios a la par que el auge de los hogares unipersonales”.

Eso se traduce en una necesidad “de al menos 100.000 hogares más de los que se construyen anualmente”. ¿Quién compra?

“Detectamos que un volumen muy representativo de esta demanda está conformado por un perfil solvente, con alto poder adquisitivo, con foco inversor del 10% y con un peso extranjero que ya alcanza el 15% de las operaciones”, relata Matos.

Pero matiza: “También existe un perfil más modesto que interactúa con el mercado esperando a que el precio pueda llegar a descender y encontrar una oportunidad, como el público joven que busca emanciparse”.

En definitiva, y según la directora de Estudios de Fotocasa, “es lógico pensar que si el mercado va a recibir más demanda, y sigue con la misma oferta, los precios tenderán a subir”.