Las claves
nuevo
Generado con IA
El debate sobre el valor de la educación y la precariedad laboral sigue siendo uno de los grandes dilemas de la sociedad española.
En un país donde muchos jóvenes encadenan empleos temporales pese a contar con títulos universitarios, las diferencias entre lo que se estudia y lo que el mercado demanda se han convertido en motivo de frustración y debate público.
En el plató de LaSexta Xplica, esta realidad quedó reflejada cuando un colaborador, llamado Miguel, compartió su experiencia. "Conozco muchísima gente con carreras que ahora mismo están en un Burger King o en un McDonald’s", comentó.
El gran problema de los títulos
Sus palabras despertaron una respuesta inmediata de Javier Díaz-Giménez, economista y colaborador habitual en programas de análisis económico.
Con tono tranquilo pero directo, replicó: "Pues efectivamente, cuando tú estudias algo que no tiene salidas, terminas en un Burger King o en un McDonald’s, por supuesto".
La frase, sencilla y contundente, resumió la dureza del mercado laboral para quienes no logran encajar sus estudios en un contexto cada vez más competitivo.
Durante su intervención, Díaz-Giménez ofreció un análisis sobre la situación económica del país. "Los datos macro son los que son, y depende de con qué los compares", explicó.
"Si los comparas con otros países europeos, claramente la economía española va bien, pero esa macro es perfectamente compatible con todo lo demás que estamos oyendo", añadió.
El economista reconoció que, pese al crecimiento en términos macroeconómicos, una gran mayoría de ciudadanos vive una situación prácticamente imposible. "Hay muchas personas en España que les cuesta mucho trabajo llegar a fin de mes", afirmó.
En este sentido, añadió que el aumento de precios y el encarecimiento de la vivienda han agravado la sensación de desigualdad. "Claro que la vivienda está muy cara, claro que los precios han subido y claro que los salarios no han subido tanto como los precios", subrayó.
En su opinión, el modelo de crecimiento actual es frágil: "Estamos creciendo con muchos trabajadores, pero el PIB per cápita no".
También destacó el impacto de la inmigración: "En España llegan 600.000 inmigrantes todos los años, con muy bajo capital humano, y esas personas al final terminan cobrando el valor de su tiempo".
Por otra parte, Díaz-Giménez diferenció entre responsabilidades públicas y personales. "El precio de la vivienda solo puede ser responsabilidad de una mala gestión de los 8.000 alcaldes de este país", sostuvo.
A su vez, recordó que "el salario y el valor de la productividad de cada uno depende en buena medida de las decisiones personales de cada uno".
Antes de concluir, el economista dejó una reflexión más humana: "Una sociedad hay que valorarla por cómo les va a los que peor les va", afirmó.
"A los que peor les va hoy en España, no les va bien, y el crecimiento del Producto Interior Bruto no les está llegando", concluyó.
